¿Qué es la anafilaxia?

Los primeros síntomas de la reacción alérgica más grave son fuerte picor en la piel, aparición de hinchazón y efema en los párpados y los labios

La anafilaxia es la reacción alérgica más grave | iStock La anafilaxia es la reacción alérgica más grave | iStock

La anafilaxia es la reacción alérgica más grave y puede llegar a provocar la muerte. Los primeros síntomas de la anafilaxia son fuerte picor en la piel, aparición de hinchazón y edema en los párpados y los labios. También se pueden presentar síntomas digestivos entre los que destacan las náuseas, los vómitos y la diarrea, síntomas respiratorios cómo la dificultad para respirar, dolor intenso en el tórax, la sensación de tener algo en la faringe, el cambio del tono de voz y la rinitis. Por otro lado, pueden haber síntomas neurológicos cómo confusión, pérdida de conocimiento y convulsiones. Finalmente, también se pueden desarrollar síntomas cardíacos cómo taquicardia, palpitaciones, hipotensión y mareos.

Es fundamental destacar que en un 20% de los casos de anafilaxia no se observan síntomas cutáneos, dificultando así significativamente el diagnóstico precoz. En algunos pacientes pueden aparecer cuando ya ha habido afectación sistémica. Hay múltiples causas de anafilaxia y varían según la edad de los pacientes. En los niños, por ejemplo, las causas más frecuentes son los alimentos como el huevo, la leche, los frutos secos, el pescado y el marisco, entre otros. En cambio, en los adultos las causas más comunes son los alimentos, los fármacos como los antibióticos, los antiinflamatorios, contrastes y anestésicos u otros elementos como el látex y las picaduras de himenópteros.

Las causas en los adultos son los alimentos, los fármacos cómo los antibióticos, los antiinflamatorios, contrastes y anestésicos u otros elementos cómo el látex y las picaduras de himenópteros

Aparte de las causas, es fundamental valorar otros factores en los que se desarrolla la reacción: el ejercicio físico, la ingesta de bebidas alcohólicas, la toma de fármacos, infecciones y situaciones de estrés, que pueden potenciar las reacciones alérgicas de los pacientes. El diagnóstico lo realizará un especialista en Alergología mediante la realización de pruebas cutáneas, analíticas e incluso pruebas de provocación controladas.

El tratamiento de primera línea es la adrenalina intramuscular y el de segunda línea los corticoides y los antihistamínicos. Los pacientes muy diagnosticados y con episodios de anafilaxia tienen que disponer de un "kit de emergencias" con estos fármacos y llevarlo siempre encima para poder actuar en caso de una reacción repentina.

Es muy importante realizar controles periódicos con un especialista en alergología para llevar a cabo un correcto diagnóstico, seguimiento y fomentar un conocimiento exhaustivo del uso correcto de los medicamentos recomendados.

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