Emprender rodeado de agua

El clima, la seguridad, las conexiones, retener y captar talento son ventajas y dificultades de poner en marcha una startup en una isla

Menorca es un paraíso, también para emprender en una startup | Pixbay Menorca es un paraíso, también para emprender en una startup | Pixbay

Emprender en una isla o montar una startup a las Baleares puede parecer un idilio que combina el clima y la calma con el trabajo. Lanzarse a las aguas de la emprendeduría es complicado y si le añadimos las barreras que comporta la insularidad, la aventura se vuelve un mar de dudas. Ahora bien, los emprendedores que estos días participan en Calvià al Smart Island World Congress no cambiarían su ubicación para nada del mundo. El clima, las buenas conexiones, la seguridad, la proximidad con la Administración y el ambiente internacional acontecen una ventaja competitiva que puede compensar las dificultades para encontrar y retener talento.

Desde Mallorca para el mundo

La empresa mallorquina de telecomunicaciones Wireless DNA (WDNA) participa al SIWC. Esta compañía, que ganó en 2017 el premio nacional Cepyme 2017 a la Innovación Tecnológica, nació como startup en 2014. Su CEO y co-fundador, el ingeniero de telecos por la UIB José Mañas, explica que WDNA se dedica a "dar servicios de telecomunicaciones a grandes emprendidas operadoras de telefonía móvil, esencialmente". Ofrecen consultoría y auditoría para "poner orden en el caos de las redes de telefonía móvil para optimizar, dar mejores servicios y reducir costes". Desde Mallorca dan servicio de manera internacional: Israel, Latinoamérica, México y tienen entre sus clientes AT&T, el operador más grande del mundo.

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Los tres fundadores, amigos de la infancia, habían trabajado a Siemens y Nokia, después de años de cercar por el mundo -Portugal, Filipinas, la China, EE.UU.-, decidieron volver a sano roqueta "para emprender un proyecto innovador y tener un plan de vida a largo plazo".

Empezó con sólo cuatro empleados y hoy en día ya da trabajo además de 50 personas y cuenta con una facturación que ronda los tres millones de euros. Ahora, además, la empresa se abre al sector de las smart cities con meteorología avanzada y YATE.

Mañas apunta ventajas de emprender en Mallorca: "Buen tiempo, calidad de vida, buenas conexiones, tranquilidad, seguridad, un entorno idílico, sociedad abierta e internacional y una muy buena sanidad"

Ventajas e inconvenientes de emprender en una isla? "Si tienes un negocio de nicho, en principio tendrás poca competencia", pero en el caso de un negocio en que trabaja WDNA, "la competencia sigue siendo global, regulaciones, asimetrías, etc.". Y por supuesto, uno de los grandes problemas es la mano de obra cualificada y como retener el talento. Pero precisamente algunos de las ventajas de emprender en un paraíso rodeado de agua son los motivos para fijar la plantilla: "Buen tiempo, calidad de vida, buenas conexiones, tranquilidad, seguridad, un entorno idílico, sociedad abierta e internacional y una muy buena sanidad", apunta el emprendedor.

La tecnología de la Imserso tiene sello mallorquín

Vicenç Caimari es el portavoz de Brújula Technologies. Esta empresa ya no es una startup. Lo fue en su momento hace 18 años, ahora ya es una compañía que factura 10 millones de euros y da servicio desde Palma en Italia, España, Colombia, México y Portugal. Con una plantilla de 160 personas, Brújula da servicios tecnológicos a las grandes empresas del sector turístico de las Baleares: ha desarrollado, por ejemplo, el sistema de reservas de la Imserso de la empresa Mundosenior o la gestión de contenidos de los webs de Melià o Barceló.

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"Emprender en una isla tiene barreras diferentes a emprender a cualquiera otro lugar, empezando por la movilidad geográfica y las limitaciones que implica esto en el mercado de trabajo", dice Caimari. Por eso, el gerente de la empresa apunta a la formación interna como palanca para superar este problema. Otro aspecto es el acceso a la financiación: "Atraer capital privado, inversores o business angels en las islas es complicado, porque el ecosistema emprendedor es más pequeño". Por el contrario, la proximidad con la administración pública -Gobierno Balear y Consejos Insulares-, que fomenta la actividad emprendedora, es más fácil.

Caimari: "El aeropuerto de Palma, que es el tercero por volumen de pasajeros del Estado, tiene ciertas conexiones mejores con Europa que no Barcelona o Madrid"

El buen clima, seguridad y las conexiones también son un valor añadido: "El aeropuerto de Palma, que es el tercero por volumen de pasajeros del Estado, tiene ciertas conexiones mejores con Europa que no Barcelona o Madrid".

Pastillas fotográficas de Menorca

Tres menorquines fundaron el 2013 PhotoPills, una startup nacida con el objetivo "de ayudar a los fotógrafos a capturar fotos legendarias", apunta Rafael Pons, uno de los fundadores. Esta app permite encontrar y planificar los mejores momentos para hacer una foto "espectacular", como por ejemplo, conocer el momento en que el sol se encuentra en mejor posición para capturar la puesta de sol al mar.

La idea de PhotoPills surgió cuando en Germán Marqués, otro de los fundadores, se compró una cámara de fotos. Marqués vio que era muy complicado hacer buenas fotos y que había muchas preguntas que necesitaban respondida. Por eso, el app se denomina PhotoPills, "que serían pastillas fotográficas que permiten curar todos los problemas que tienen los fotógrafos para capturar sus fotos ideales", señala Pons.

Pons: "Para un negocio 100% tecnológico, el principal inconveniente de emprender en una isla es encontrar el talento"

Para el emprendedor, las ideas se pueden desarrollar desde cualquier lugar; el que es difícil es encontrar la idea y el equipo para llevarla a cabo. "Hoy en día, para un negocio 100% tecnológico, el principal inconveniente de emprender en una isla es encontrar el talento". Pons apunta que, en su caso, cuesta encontrar informáticos en Menorca, a pesar de que al ser una empresa digital se puede trabajar desde cualquier lugar. La ventaja de emprender en una isla? "Si te gusta el mar y la vida tranquila, es el lugar ideal", apunta la startup que fue una de las escogidas para participar en la primera edición del programa de emprendeduría Menorca Millennials.

Piando 'big fecha'

Santi Camps, emprendedor menorquín y fundador de la empresa Mabrian Technologies, que también participa al SIWC. La startup aplica tecnología big Fecha para conocer el comportamiento de los turistas. Fundada hace cinco años, analiza las dinámicas turísticas de la gente para saber qué tipo de productos turísticos consumen, qué destinos prefieren o en que gastan los turistas cuando son de viaje. Mabrian obtiene los datos a partir de información extraída de redes sociales como Twitter o Instagram o de reseñas hoteleras, así como de estadísticas del tráfico aéreo o del gasto turístico.

La empresa tiene clientes en todo el mundo y el hecho de ser una startup tecnológica hace que emprender desde Menorca no tenga muchos inconvenientes. El que sí que destaca Camps como un problema son las malas conexiones aéreas de la isla balear, puesto que siempre se tiene que hacer escala en Barcelona para viajar a cualquier lugar. Por eso, la empresa cuenta también con una oficina en Barcelona desde donde gestionan los temas más comerciales, mientras que la parte técnica de la empresa se hace desde Mahón. Para el emprendedor, uno de los inconvenientes de la isla son las pocas iniciativas o proyectos que ayudan a emprender, puesto que sólo hay el programa Jóvenes Empresarios, gracias al cual Camps sacó la idea para crear Mabrian Technologies.

Bolz: "Los mallorquines quieren trabajar en Mallorca y por eso ni Barcelona ni Madrid pueden competir con esta isla"

Sin embargo, el emprendedor destaca como ventaja la tranquilidad que supone vivir en una isla en comparación con la vida en una gran ciudad. Mabrian Technologies cuenta con una plantilla de 12 empleados, nuevo de los cuales trabajan a la oficina de Menorca. "Estamos muy satisfechos porque hemos conseguido atraer talento en Menorca", apunta Camps.

Alemanes y mallorquines

El alemán instalado en Mallorca, Chris Bolz, explica el caso de Urban Drivestyle. Esta startup quiere añadir electricidad y al sector del alquiler de vehículos a las islas. El fundador, Ossian Vogel, diseñó su propio vehículo, el Unimoke, y lo financió con 350.000 euros a través de Indiegogo. La primera remesa de bicis eléctricas llogables desde una app se produjo en Mallorca y ahora la tercera ya se construye en Berlín. En total la compañía da trabajo a 20 personas.

Bolz dice que emprender en una isla es una buena idea "porque siempre hay un local que quiere ayudarte en el proyecto" y en su caso concreto "la cantidad de turistas es muy buena para probar productos nuevos". En cuanto a la busca y retención de talento, Bolz afirma que no ha tenido problemas: "Los mallorquines quieren trabajar en Mallorca y por eso a la hora de retener talento, ni Barcelona ni Madrid pueden competir con esta isla".

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