Las raíces de Venturi , una startup que diseña drones para inspeccionar redes eléctricas o gasoductos autónomamente, se remontan a cuando los socios fundadores estudiaban ingeniería aeronáutica en la Universidad. "Cuando estudiábamos a la UPC de Terrassa montamos una asociación para participar en competiciones internacionales de estudiantes en las cuales diseñábamos y construíamos un avión de altas prestaciones", explica Juan Hita, CEO y cofundador de la startup.
A partir de estas competiciones estudiantiles, Hita y sus compañeros vieron que podían aprovechar su conocimiento para hacer un proyecto que tuviera un sentido más comercial y que proporcionara un valor añadido al mercado. "Nosotros el que hacíamos eran aviones a pequeña escala, de unos 3 o 4 metros, y que funcionaban por radiocontrol. Entonces, el que hicimos fue coger este conocimiento y traerlo a los drones", recuerda Hita. Con esta nueva idea en mente, y cuando se dieron cuenta que si no se constituían como empresa sería difícil salir adelante el proyecto, el septiembre del 2016 los cinco ingenieros fundaron Venturi Unmanned Technologies.
La startup nació a raíz de la participación de los fundadores en competiciones estudiantiles del mundo de la aeronáutica
La startup diseña aviones no tripulados a pequeña escala -máximo 4 metros- que puedan hacer inspecciones autónomamente. Además, Venturi incorpora un par de innovaciones respecto al resto de UAVs (Vehículo Eléctrico no Tripulado) que hay al mercado: por un lado, la aeronave puede elevarse y aterrizar verticalmente, como los drones, "por el que podríamos decir que es como un híbrido entre avión y drone ", señala el emprendedor. Además, puede recorrer más kilómetros que estas aeronaves no tripuladas. Y por otro lado, la pila que hace funcionar el avión es de combustible de hidrógeno, en lugar de baterías eléctricas, lo cual permite multiplicar el tiempo de vuelo entre tres y cuatro veces más del que podría hacer normalmente, hasta llegar a las ocho horas.
'Drones' 100% catalanes
Todo el diseño del avión lo han realizado los cinco fundadores de Venturi desde Barcelona, así como la construcción del primer prototipo. "De momento, la construcción del drone lo hemos hecho nosotros porque también queríamos tener este know-how, pero un golpe validamos el modelo, externalizaremos parte de la construcción del avión", explica Hita.
Durante este primer año en funcionamiento, la startup ha llevado a cabo una prueba de concepto "para ver que el proyecto es viable tecnológicamente y poder enseñar a los potenciales clientes o inversores las ventajas que proporcionan nuestros aviones", señala el ingeniero aeronáutico. Las aeronaves no tripuladas diseñadas por Venturi están destinadas a facilitar las inspecciones industriales, especialmente las redes eléctricas y los gasoductos. "Hasta ahora, estas inspecciones se hacían con inspectores a pie o con helicópteros, cosa que tenía un coste muy alto", explica Hita.
La empresa empezó definiendo su segmento de mercado de forma mucho más abierta, puesto que los drones tienen muchas aplicaciones, pero con el tiempo vieron que era mucho mejor especializarse. "La mayoría de empresas que se dedican a las naves no tripuladas se enfocan mucho a intentar llegar a todos los segmentos del mercado y al final no dan una respuesta específica para cada uno; no es el mismo un drone por agricultura que un drone por defensa y seguridad". Es por eso que la startup se ha enfocado en dos verticales concretas, la distribución eléctrica y los gasoductos, puesto que son dos sectores donde los fundadores de Venturi ven más potenciales clientes.
Darse a conocer internacionalmente
El objetivo ahora de Venturi es intentar encontrar los primeros clientes. La empresa ya ha hecho algunos contactos con grandes empresas españolas, a pesar de que también quieren darse a conocer en el mercado internacional. "En España hay mucha incertidumbre sobre las posibilidades de los drones, puesto que la legislación todavía no está del todo definida y va un poco lenta", apunta el emprendedor. Por eso, Venturi tiene la intención de participar en la feria internacional Gastech, que se celebrará en Barcelona el septiembre del 2018. "Se trata de una feria dedicada a la industria de los petróleos y similares, donde irán grandes multinacionales, por lo cual queremos aprovechar nuestra participación para presentar el producto", señala Hita.
Hita: "En España hay mucha incertidumbre sobre las posibilidades de los 'drones', la legislación todavía va un poco lenta"
La startup, ubicada a la incubadora ESA BIC de Barcelona Activa y la Agencia Espacial Europea en Castelldefels, se ha financiado con recursos propios y con la subvención recibida del Ayuntamiento de Barcelona para estar en esta incubadora. Los emprendedores no descartan abrir alguna ronda de crowdfunding pero más adelante, cuando el proyecto esté algo más consolidado.
Los miembros del equipo de Venturi tienen previsto hacer el lanzamiento de su producto el septiembre del año que viene aprovechando el Gastech, a pesar de que antes empezarán a hacer ya alguna demostración con clientes. "La idea es exponer en esta feria un caso con alguno de los clientes con los cuales habremos trabajado los meses antes y presentar los beneficios de usar los drones en estas industrias", apunta el emprendedor.
