Catalunya Impacta, los motores del progreso tecnológico del país

El Cercle Tecnològic reconoce el trabajo de tres empresas catalanas, una por sector productivo, que han aplicado la tecnología a su cadena de valor

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Roger Torrent confía en la tecnología. conseller d'Empresa i Treball de la Generalitat de Catalunya es claro: todos los sectores económicos del país, todas las ramas de la producción y de la prestación de servicios, necesitan implementar adelantos técnicos a sus negocios con objeto de "mejorar la eficiencia y la calidad" de cualquier que sea lo final de su cadena de valor. El Cercle Tecnològic de Catalunya, una asociación que agrupa un buen trozo del creciente sector TIC del país, comparte la apreciación, y la ha concretado en la primera entrega de los reconocimientos Catalunya Impacta; unos galardones dirigidos a empresas de los tres sectores productivos por su proficiencia en la implementación de nuevas tecnologías a sus propuestas empresariales.

El presidente del Cercle Tecnològic, Joan Ramon Barrera, lleva más lejos este análisis. Según el empresario, "la tecnología es un elemento transformador de la sociedad", una palanca para introducir cambios cualitativos en la organización de relaciones, consumo, producción... Con más de 113.000 trabajadores y una aportación del 10% del PIB del país, la industria tecnológica ocupa espacios prioritarios por todas partes; se ha convertido en "un pilar fundamental de la economía del país", reitera el presidente. En este sentido, el Cercle Tecnològic ya 13 años que publica su barómetro del sector. EL dirigente de la entidad recuerda cómo los galardones concretan una busca de materialidad de los estudios y los datos recogidos al documento por, mediante la iniciativa, visibilitzar algunos de los casos de éxito del ecosistema del país. "El país tiene muchas ganas de buscar posiciones de liderazgo innovador", opina Josep Maria Farran, CEO de Applus IDIADA, una de las firmas premiadas.

Torrente: "La tecnología hace una empresa catalana más sostenible y competitiva en el contexto internacional"

Desde las administraciones reconocen, de hecho, esta pulsión de la empresa catalana. Torrente alaba que sectores que no están tan estrechamente relacionados con las nuevas tecnologías, cómo es el de la agricultura, "están haciendo un esfuerzo muy intensivo para implementar la digitalización". Así lo confirma el presidente de otro de los ganadores de la velada, la Indicación Geográfica Protegida Manzana de Girona. Según Jordi Armengol, desde el sector apuestan por la tecnología porque los hacen "más competitivos, pero también permite un uso responsable de los recursos naturales que aporta el territorio". Así, la transformación que impulsa la implementación de procesos tecnológicos contribuye a la máxima que subraya el titular de empresa de hacer del ecosistema catalán uno "más sostenible y competitivo en el contexto internacional".

Según el vicepresidente de la Generalitat y consejero de Políticas Digitales Jordi Puigneró, la evolución del tejido empresarial catalán en el ámbito de las tecnologías ratifica estas apuestas. "Tenemos empresas que lideran la vanguardia, que son buque insignia de sus sectores", apunta. En complicidad con los representantes del Cercle Tecnològic, Puigneró subraya la aceleración del proceso por los efectos de la pandemia. "Con todo el trabajo de pedagogía que llevábamos haciendo con la transición digital y ha tenido que venir un punyeter virus para impulsar la tecnología", ironiza, apuntando que, de cara al futuro, se tienen que construir las estructuras porque no hagan falta grandes acontecimientos globales para despertar el interés por las TIC. "No solo tenemos que cambiar en presencia del abismo, tenemos que aventurar hacia donde va el mundo y avanzarnos a los cambios", espeta.

Galardones multisectorials

Un juzgado formado por varias personalidades del mundo de la empresa y la escena tecnológica del país ha decidido los ganadores de esta primera edición de los Catalunya Impacto entre más de 30 candidaturas presentadas. La vicepresidenta de y Foment del Treball CEO de Social Caro Mar Alarcón, el director del Internet of Things Solutions World Congress Roger Buey o la presidenta de la Cambra de Comerç de Barcelona Mònica Roca han formado parte del grupo que ha entregado los trofeos diseñados por el alumni de Elisava Júlia Esqué –una colaboración con las escuelas de diseño que se mantendrá en futuras ediciones, según ha apuntado el mismo Cercle Tecnològic–. Barrera ha valorado la tarea del jurado, entre el que se generaron "debates de calidad" sobre las prioridades del sector tecnológico catalán.

El primero premiado, correspondiendo al sector primario, ha sido la IGP Manzana de Girona, por la iniciativa Giroreg. Se trata de una herramienta que recomienda los patrones de riego de las plantaciones fruitals según lecturas de la plataforma Watercrop. Cómo ha explicado Armengol, la tecnología permite saber la previsión meteorológica a siete días ver, la humedad del suelo o las necesidades de las plantas analizadas. El presidente de la demarcación celebra que, desde la implementación de los más de 150 aparatos, se han "conseguido árboles con una salud más equilibrada y con frutas de más calidad". La aplicación del recomanador de riego ha logrado, además, un 30 % en la reducción del consumo de agua y de energía en los motores de la maquinaria, en cuanto que ha conseguido optimizar los procesos de cura de las plantaciones. "Ahora somos más intensivos y productivos", celebra Armengol.

"Sin el Supercomputing Center, el Sincrotró o el cable submarino, ni podríamos pensar tener algunas de estas tecnologías"

En el caso del sector industrial, Applus IDIADA se ha hecho con el galardón gracias a su "banco de pruebas para el coche del futuro". Mediante una colaboración con Orange y Ericsson, la firma ha establecido un sandbox para el vehículo autónomo y conectado al Baix Penedès, uno de sus grandes centros internacionales. "Un momento de un cambio tecnológico tan importante es también uno de grandes oportunidades", augura Ferran, que subraya la capacidad transformadora de las tecnologías conectadas sobre el sector del automóvil. En el espacio de Applus han hecho pruebas Nissan, Seat o Mclaren, con experimentos de ancho espectro desde el 2G hasta las últimas propuestas 5G. "Con los coches pasará cómo con los móviles; que antes eran para trucar y ahora hacemos de todo menos trucar", bromea el CEO, que ve un potencial para reconvertir la del coche desde una industria puramente centrada en la movilidad a una "de ocio y goce" gracias a la automatización.

El sector servicios ha aportado una emergente de uno de los sectores tractores del ecosistema catalán: el healthtech. Elem Biotech, una startup surgida del BSC, se especializa en la creación de gemelos digitales del cuerpo humano para simular tratamientos, operaciones y efectos de intervenciones sobre los órganos de un paciente concreto. Su CEO, Christopher Morton, apunta a los múltiples efectos positivos que un modelo cómo el suyo puede tener sobre la medicina. "Nos mujer la capacidad de hacer todos los ensayos necesarios; podemos introducir diversidad en los tratamientos o reducir la investigación con animales", celebra el consejero delegado. Cómo en muchos de los casos de éxito al mundo de las emergentes tecnológicas, Elem tiene especial potencial porque consigue hacer del mundo digital una extensión del físico; y renovar la práctica médica por el camino. "No tendría sentido reproducir los errores del anterior sistema", reafirma Murton.

Barcelona capital

"Es mucho más fácil ofrecer al talento un trabajo a Barcelona que a Bélgica, ya te lo puedo bien asegurar", bromea Murton. El atractivo de como Catalunya hub de talento, indudablemente, pasa por cuestiones fisiológicas y culturales –el clima, el Mediterráneo, el ocio de la ciudad o la gastronomía, cómo coinciden todos los ponientes de la jornada– pero "sin infraestructuras, sin estar preparados por la revolución digital, el ecosistema no seria", establece Puigneró. No serien, de hecho, muchas de las iniciativas premiadas, ni las candidatas, confirma el comisionado de Innovación Tecnológica de Barcelona Michael Donaldson. "Sin el Supercomputing Center, el Sincrotró o el cable submarino, ni podríamos pensar tener algunas de estas tecnologías".

Puigneró, en este sentido, celebra la iniciativa de los galardones del Cercle Tecnològic como herramienta para ofrecer visibilidad a un sector tecnológico catalán que "ya es grande, ya puede hablar de tú a tú al resto de industrias". La presencia de congresos cómo el MWC, renovado hasta el 2030, o el ISE, que frotó los 50.000 asistentes en su primera edición, a la vegada sirve de celebración y de motor de crecimiento para unas tecnologías catalanas que miran en el mundo. "Los años que tienen que venir tienen que ser positivos y continuar la línea de hacer más importando el sector tecnológico a casa nuestra", concluye el vicepresidente.

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