¿Cómo se emprende en el mundo de la comunicación deportiva?

La primera etapa al montar un proyecto empresarial: "100 llamadas, 10 reuniones, un cliente"

La experiencia de emprender en comunicació deportiva La experiencia de emprender en comunicació deportiva

¿Qué factor empuja a emprender en plena pandemia? En el caso de Walden Outdoor Sports Communication, liderado por dos periodistas expertos en comunicación corporativa, fue porque creemos al 100% en un proyecto compartido. Impulsar una agencia de comunicación especializada en deportes outdoor solo se puede hacer si tienes pasión por lo que haces. Por si nuestro ejemplo sirve de algo, pensamos que merece la pena explicar qué supone sacar adelante una pequeña empresa de estas características.

Este octubre hará un año que se fundó la empresa, una agencia que ofrece servicios de comunicación a un nicho de mercado muy específico. Cualquier marca, empresa, deportista u organización de acontecimientos que se dedique al ámbito de los deportes al aire libre puede acudir a ella. Agencias de comunicación hay para parar un tren, pero especializadas en este sector, se pueden contar con los dedos de una mano. Un plan de empresa previo antes de iniciar esta aventura así lo confirmaba.

Las primeras semanas y meses de arrancar una agencia como esta son, sobre todo, para ponerse el sombrero de comercial. Es una tarea ingente, de hormiguita, de picar mucha piedra y con mentalidad de carrera de larga distancia. Esto quiere decir hablar con mucha gente. En su día, el consultor de comunicación Josep Salvat nos dijo una frase que nos ha quedado grabada en la memoria: "100 llamadas, 10 reuniones, un cliente". Una manera muy gráfica de explicar la dificultad de encontrar clientes.

La vida de los nuevos autónomos a veces tiene más precariedad que glamour

También hay muchos aspectos sobre el emprendimiento que no se explican y aparecen a medida que avanzas. Además, habría que desmitificar en parte el aura de héroe que suele acompañar ciertas historias sobre los emprendedores. No seremos nosotros los que echemos por tierra el esfuerzo que supone crear cualquier negocio, ya sea una pequeña agencia de comunicación, una startup o una tienda de víveres, pero también es cierto que sería conveniente explicar que la vida de los nuevos autónomos a veces tiene más precariedad que glamour.

Una vez la empresa empieza a funcionar porque los primeros clientes confían es cuando se ve que el proyecto tenía razón de ser. Para ser creíble, tiene que ir acompañado de una filosofía y unos valores. En el caso de Walden, hemos apostado por la sostenibilidad y por el teletrabajo como dos de los pilares fundamentales. No tenemos nada en contra del trabajo presencial, porque de hecho el contacto directo también es un factor importante para establecer relaciones profesionales, pero somos de los que pensamos que entre todos tenemos que reducir al máximo los desplazamientos.

Para ser creíble, un nuevo proyecto empresarial tiene que ir acompañado de una filosofía y unos valores

Para acabar, un humilde consejo para todos aquellos que tienen una idea de negocio a la cabeza, un sueño profesional, en definitiva: que busquen compañeros de viaje de confianza, se dejen asesorar y que se atrevan a probarlo, siendo conscientes de que todo es muy volátil y que nos tenemos que adaptar a las situaciones cambiantes. A partir de aquí, mentalidad de corredor de fondo y ¡adelante con los nuevos proyectos!

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