Cuando hablamos de detectives privados nos vienen a la imaginación imágenes estereotipadas de hombres con gabardina, sombrero alado, ademán altivo y misterioso que investigan al amparo de la noche desde un rincón de un callejón. Un Inspector Gadget, en definitiva. Este aura de misterio y novela negra nos aleja del trabajo y la utilidad que un detective puede tener en la vida real. Enrique Arranz, expresidente del Colegio de Detectives y director de Infodetec, pasa por cuarta vez por el Bizbarcelona para desmitificar y poner en valor el trabajo detectivesco en el mundo empresarial.
Veinte años de experiencia al frente de su empresa y en el oficio de detective marcan el carácter del ponente y de la conferencia que acoge el Bizbarcelona. Arranz ha trabajado con empresas de todo tipo de sectores y ha sacado adelante su propia agencia, especializada en investigaciones para empresas. Todo ello le avala para revelar algunos de los secretos que sólo un detective empresarial, una persona que se ha movido como pez en el agua entre las bambalinas de muchos negocios, podría explicar.
La experiencia de la transversalidad
Controlar la atención. Puede parece sencillo, pero no lo es tanto. Para Arranz uno de los fundamentos para sacar adelante la empresa es saber centrarse, poder focalizarse y compartimentar la vida privada y la profesional. "Tus problemas no desaparecerán de la noche a la mañana, pero tendrás que seguir trabajando", asegura el detective. Para él, cuando se deja que los pensamientos personales se traguen la atención se pierde la capacidad de identificar posibles problemas. "Los problemas en la empresa raramente aparecen de repente. Normalmente hay señales previas, que permiten evitarlo, pero si no estamos focalizados, no las veremos y el problema acabará explotando", sentencia Arranz.
Esta es una de las lecciones que ha aprendido de su oficio. "Cuando haces un seguimiento, es muy duro, puesto que no son sólo importantes los momentos en que sale el investigado, sino que lo son todas las horas que estás esperando que salga", explicado el detective. Considera que las horas de espera en soledad son cruciales, puesto que sin una disciplina férrea para concentrarte en lo que estás haciendo es fácil dejarse llevar por las propias preocupaciones, echando a perder así toda la investigación por falta de atención.
Arranz: "Estoy persiguiendo una causa noble y esto me hace valorar todavía más mi trabajo"
La convergencia de su faceta de empresario y de detective empresarial lo ha llevado a dibujar una clave del éxito, un concepto que él bautiza cómo la 'causa noble'. "Yo tengo un negocio y evidentemente quiero que genere dinero. Pero al mismo tiempo estoy persiguiendo una causa noble y esto me hace valorar todavía más mi trabajo", reconoce el empresario. "A través de mi experiencia como detective he visto que a aquellas empresas que persiguen una causa noble tienen menos problemas y los que tienen, acaban teniendo una resolución en positivo", explica el detective. Basándose en su larga trayectoria, Arranz se ha dado cuenta que aquellos empresarios que no creen que detrás de su actividad hay este tipo de causa acaban ligados a su negocio sin creer en él. "Son trabajos nutricionales, que sólo sirven para vivir. Esta gente acaba sufriendo como empresarios, porque no hay una motivación última", asegura el detective.
Pon un detective en tu negocio
"Normalmente cuando llamas es que tienes un fuego en la empresa y se tiene que apagar. ¿Qué pasa? Que cuando llega el detective ya es demasiado tarde y si le hubieras llamado antes te habrías ahorrado muchas cosas", explica Arranz, de acuerdo con su propia experiencia. El mantra de este detective y empresario es ser preventivo y no reactivo.
Pero, ¿en qué situaciones puede necesitar un negocio la tarea de un detective? Arranz lo ejemplifica con el caso de la contratación de un nuevo directivo. Si contrates un directivo nuevo y después resulta que desvía fondos y que es una práctica que ya había hecho antes se encuentra un problema que se podría haber evitado con una investigación previa y que se convierte en una bomba de relojería. "Mayoritariamente investigamos deslealtad en la empresa, y ésta puede tener muchas formas. Desviar fondos es una pero también puede ser un comercial que en sus horas de trabajo se dedica su vida personal", concluye Arranz.
No sólo en este tipo de casos un detective puede ser útil. Arranz plantea el uso de los detectives en las empresas de forma regular. "Tendrías que contar con un detective de la misma forma que cuentas con un gestor, un abogado de cabecera o un contable. Al fin y al cabo, todos nos encargamos de asesorar y solucionar problemas", argumenta el detective, quien apuesta porque una empresa incorpore en su equipo el uso recurrente de los profesionales de su oficio.
El experto afirma que "un detective en el negocio de forma habitual ayudará a prevenir el problema que él mismo hubiera tenido que ayudar a resolver en el futuro"
En su experiencia personal, Arranz se encuentra en grupos de trabajo de varias empresas donde aconseja y asesora, además de investigar. "Por mi trabajo he tratado con empresas de todo tipo de sectores así que cuando estoy en estos grupos de trabajo puedo aportar mis veinte años de experiencia en toda clase de sectores", asegura el detective. "Un detective en tu negocio de forma habitual ayudará a prevenir el problema que él mismo hubiera tenido que ayudar a resolver en el futuro", concluye el detective.