Crisis de competitividad
Es un grave error que la política, las empresas y los sindicatos no reaccionan a este inconveniente. España necesita reformas estructurales en el campo de la formación profesional para responder a la crisis. Trabajadores y empleados con una formación de calidad pueden diferenciarse de los colegas a los países baratos y, así, pueden justificar un salario más alto. Sin reformas, la única salida está al bajar los salarios todavía más o aceptar, que la crisis económica se convierte en una constante de nuestra vida.
Eurobons y una política monetaria más relajada no son la solución de la crisis actual. No hablamos de una crisis del euro, ni de la deuda, ni de una recesión económica, sino de una grave carencia de competitividad .