El mundo esta cambiando muy rápido. La covid-19 ha sido un acelerador de macro-tendencias parecido al viento de popa que de repente cambia la velocidad de los barcos de vela que se pueden ver en el litoral de la ciudad, aquí en Barcelona. Hace unos días tuve la suerte de participar en un encuentro de más de cien directivos, empresarios y emprendedores, organizado por Netmentora, la mayor red europea de líderes de empresa que apoya a personas emprendedoras y a la creación de empleo. Una iniciativa de la que formo parte.
Las numerosas meses redondas y temáticas permitieron una discusión abierta sobre el mundo covid y post-covid y crear una Guía de Reflexión y Acción. El reto económico que emergerá es gigantesco en una sociedad que cambia como lo hace la economía y sus sectores económicos que verán una recuperación asimétrica con ganadores y perdedores. Los cambios son multidimensionales y para entenderlos no hay nada mejor que la colaboración, el debate y el intercambio.
De este intercambio resaltan un buen puñado de ideas. La primera, sobre una sociedad que cambia con retos profundos que demandan nuevos liderazgos empresariales: la igualdad, el papel de la mujer y la sostenibilidad. La sociedad demanda nuevos liderazgos económicos con más propósito, una empresa ciudadana y responsable. Empresas que cautivarán a los consumidores no sólo a través de sus productos, sino también de sus políticas de gestión del talento y gestión medioambiental.
"La sociedad demanda nuevos liderazgos económicos con más propósito, una empresa ciudadana y responsable"
La segunda, un consumidor con mucha más información y poder. Un consumidor que elige ante el amplio abanico de opciones que ofrece la larga cola de productos que se venden en la red (long tail) y que marca la agenda de innovación de las empresas. El cambio masivo que hemos experimentado este año con la compra de productos por internet genera ajustes en toda la cadena de valor. Nuevos canales aparecen y otros merman e incluso desaparecen.
La tercera, las oportunidades y los riesgos que surgen de la innovación y la digitalización. La innovación será disruptiva o no será. Para ganar mercados o crear otros nuevos, los cambios deben ser bruscos y los servicios ofrecidos deben ser diferentes. El automóvil es un buen ejemplo con la tendencia creciente a pagar por uso en vez de pagar por la propiedad del vehículo. La digitalización es la herramienta que permite acelerar todos estos cambios. Permite la automatización, la eficiencia, la inmediatez, y la capacidad ilimitada entre otros. Creará también un impacto en la sociedad para cambiar la oferta de trabajo y todos nos tendremos que ajustar.
"Un nuevo liderazgo generador de confianza, inspirador y cooperativo nos ayudará a acelerar la recuperación que tanto necesitan nuestras empresas y nuestra gente"
La competencia, en un mundo muy dividido hoy, parece que será cada vez mayor. Para ganar competitividad será cada vez más necesaria la cooperación entre empresa, gobierno y sociedad. Empezando a nivel local, aquí en la ciudad regional, pero también internacional aprovechando la potencia de la especialización y los clústeres tecnológicos.
Un nuevo liderazgo generador de confianza, inspirador y cooperativo nos ayudará a convertir las ideas de la Guía de Reflexión y Acción para la empresa post-covid en acción, y ayudará sin duda a acelerar la recuperación que tanto lo necesitan nuestras empresas y nuestra gente.