Miquel Gotanegra

Opinión

Nuestras asignaturas pendientes

Hace pocos días finalizaba en Girona la 59a edición de Girona Tiempo de Flores (este año dedicada a su fundadora Maria Cubarsí) que ha sido un gran éxito en todos los sentidos: de organización y de público con una ciudad que ha sido llena a rebosar durante los 9 días que ha durado la muestra. En Caldes de Malavella se ha celebrado el Open de España de golfo; y en Figueres, en febrero, el Festival Internacional de Circo Ciutat de Figueres.... Son sólo algunos ejemplos de la imaginación y la capacidad de organización de grandes acontecimientos de la sociedad civil gerundense que, a la vegada, suponen una gran demostración de desestacionalització de sus destinos.

El sector turístico gerundense, uno de los poco sectores económicos de la demarcación que ha resistido un poco la crisis con una aportación directo al PIB del 13 %, está haciendo grandes esfuerzos con una contención de sus precios, una gran preparación de sus equipos y con inversiones permanentes para poder continuar siendo una de los mejores destinos turísticos de todo el Estado.

A la demarcación de Girona disfrutamos de una buena red sanitaria, tenemos potentes infraestructuras (una estación del AVE, un aeropuerto....), una policía preparada y, sobre todo, tenemos un país donde hay casi de todo: mar, montaña, natura, cultura, gastronomía y una gran variedad de deportes. Sin embargo, somos conscientes que todavía quedamos muchas cosas para continuar haciendo. Pero, y las Administraciones y las grandes compañías están haciendo los deberes?

Hoy, hay muchas zonas de las comarcas gerundenses faltas de ADSL, hay estaciones del AVE con deficientes señalizaciones (el que dificulta llegar) y mal conectadas con el transporte público de su área. También hay paseos y calles convertidas en grandes centros comerciales a cielo abierto donde campi quién pueda, una carretera nacional II sin acabar, variantes de ciudades gerundenses para hacer, un aeropuerto infrautilitzat donde faltaría atraer nuevas compañías aéreas, grandes equipamientos culturales para señalizar, grandes parques naturales pero poco pensados como recurso turístico...

Y todo esto, de momento, no lo podemos solucionar los empresarios gerundenses.