Pimec y el Ayuntamiento de Barcelona comienzan una nueva oficina de apoyo a la pequeña y empresa media en su transición energética. El primer teniente de alcaldía de la ciudad, Jaume Collboni, y el presidente de la patronal Antoni Cañete se marcan como objetivo ofrecer asesoramiento a las empresas en cuestiones cómo la autoconsum, el aislamiento de edificios y las nuevas tecnologías en el ámbito de la domótica, para así mejorar su eficiencia energética y encaje con procesos transformación hacia la sostenibilidad.
Según las previsiones del servicio, que funciona de la mano de Barcelona Activa, cada año se recibirán entre 200 y 400 solicitudes de empresas de la ciudad con objeto de recibir acompañamiento técnico, administrativo o financiero en sus procesos de adaptación energética. El regidor considera, así, que el proceso tiene que "ponerlo fácil porque la actividad económica de la ciudad cambie de modelo energético".
Según el presidente de Pimec, Antoni Cañete, las pymes, microempresas y autónomos se encuentran con muchos más obstáculos para las grandes empresas a la hora de adaptarse a los nuevos requerimientos de respeto por el medio ambiente y eficiencia energética. El dirigente empresarial, en este sentido, celebra una iniciativa de cooperación publicoprivada como esta oficina por su potencial en el apoyo de la pequeña empresa del país, mayoritaria en el tejido productivo catalán.
Por su parte, Collboni ha defendido que la transición sostenible del mundo de la empresa es un factor relevante para "asegurar la soberanía energética" del país después de los efectos sobre este mercado de la invasión rusa de Ucrania. El teniente de alcaldía considera que la ayuda a los pequeños empresarios de la capital tiene, además, el potencial de crear nuevas actividades "relacionadas con la economía verde y circular" cómo las que el consistorio quiere impulsar.