Los catalanes somos quienes invertimos más a comprar ropa de todo el Estado español. En total, según los datos de Eae Business School, cada año gastamos 5.878,4 millones de euros en moda. Ahora bien: nos hemos planteado cómo se ha producido nuestra camiseta preferida o donde se han fabricado aquellos texanos agarrados que nos encantan? Quizás tendríamos que reflexionar después de desastres como el ocurrido el 2013 a Rana Plaza, en Bangladesh, donde murió 1.127 personas y 2.431 más resultaron heridas a raíz del derrumbamiento de una fábrica donde se producía ropa por marcas como Benetton, Mango, Inditex o Primark. Precisamente esta reflexión es la que hace Comovita, el nuevo marketplace de la ropa sostenible, que quiere demostrar que la moda consciente también es "sexy", tal como remarca su CEO y cofundador Borja Duran.
Bajo la premisa de facilitar la accès a la moda sostenible, esta startup hace de paraguas a una decena de marcas que tienen el común denominador de utilizar materiales orgánicos o reciclados en el proceso de producción y ofrecer unas condiciones justas a sus trabajadores. "Intentamos que todas las marcas con las cuales trabajamos tengan certificados oficiales de fair traide. En algunos casos, pero, son empresas pequeñas que encara no los han conseguido, así que colaboramos para garantizar que las condiciones laborales son las adecuadas", asegura Duran.
Comovita apuesta por marcas que reciclan materiales y aseguran un trato justo a los empleados
"Queremos cambiar la percepción de la gente: a menudo se piensa, equivocadamente, que la moda sostenible es fea o muy cara", afirma el emprendedor. La idea de fundar Comovita fecha de septiembre de 2018, después de que Duran volviera de la China, donde tenía una empresa de electrónica de consumo. "Me cansé de producir productos muy baratos, con todo el que esto comporta, para que los europeos los compraran", dice. Por este motivo, el abril de 2018, Duran puso en marcha Le Morne, una marca de banyadors éticos para hombres. "Con todo, me di cuenta que, a pesar de ser una buena iniciativa, el impacto que tendría la marca por sí sola seria muy reducido y me propuse unificar la fuerza de todas estas firmas que apuestan por la sostenibilidad y unificarlas en una sola plataforma de venta", explica.
Una apuesta de futuro
Comovita ya hace tres meses que está en funcionamiento y Duran se muestra satisfecho con los resultados: durante su primer mes completo trabajando han facturado 5.000 euros "sin casi invertir en marketing", dice su CEO, "influencers de aquí han empezado a comprarnos algunas piezas sin ningún convenio de colaboración y a compartirlo a su Instagram". Con todo, sus principales puntos de venta, de momento, se sitúan al norte de Europa (especialmente en Alemania), puesto que según asevera el empresario, "al sur todavía se ha incorporado la preocupación por la sostenibilidad en las decisiones de compra".
Las empresas que trabajan con Comovita tienen que aportar certificados de 'fair trait' | Cedida
"Estamos planteando una campaña de publicidad muy fuerte con influencers de toda Europa", dice Duran. De cara 2019, plantea una ronda de inversión que contribuya al crecimiento más rápido del marketplace. De momento, el Comovita ha arrancado gracias a 40.000 euros provenientes de recursos propios. "No está claro hasta qué punto crecerá la preocupación en Europa por la sostenibilidad, de hecho, apenas empieza ahora, pero nosotros estamos haciendo una apuesta muy fuerte. Queremos ser la tienda en linea de referencia al continente", concluye.