En Cristian de Santos e Ignasi Aliguer son dos ingenieros que se han propuesto modernizar el sector de la construcción. Los dos son ingenieros y cofundadores de Saalg , la startup que quiere lanzar al mercado este 2018 un software que analiza en tiempo real los datos que se obtienen de las obras. Y esto qué quiere decir? Que las constructoras, promotoras y empresas relacionadas con la actividad pueden optimizar su trabajo y reducir costes. Cómo si fuera el cerebro o ningún pensante en la obra, una mente brillante que ha sido seleccionada por la MWCapital y Barcelona Building Construmat cómo una de las iniciativas más innovadoras del sector.
Hasta ahora la tarea se hace poniendo unos sensores en el momento de ejecución de la obra. Y no es que no sirvan para el trabajo, sino que se quedan cortos ante la propuesta de estos emprendedores. "Saalg va una pasa adelante y coge los datos y herramientas de cálculo que se utilizan en fase de diseño y, a partir de unos algoritmos de machine learning, analizamos en tiempo real qué pasa para validar las hipótesis de diseño y saber qué pasará en las posteriores fases", explica de manera cuidadosa De Santos, CEO de la compañía.
De Santos: "La industria sigue construyendo prácticamente igual que hace 50 años"
A la práctica, esto supone tener más información detallada en obras que dependen básicamente del terreno como pueden ser túneles o estaciones de metro o bien construcciones a niveles subterráneos en obras de edificación. Se pueden prever paradas inesperadas, catástrofes o desajustes, reduciendo en un 10% el coste de construcción en obras civiles y hasta un 15% en fundamentación.
El producto final todavía no está acabado, trabajan sobre un prototipo que, asegura De Santos, "es 100% funcional". La previsión es salir al largo antes de mediados de año al mercado con un producto sólido y adaptable a todo tipo de clientes. "Tenemos clientes con los mismos problemas, pero que quieren soluciones diferentes", explica, "pero la idea es un sofware as a service customitzable según cada compañía".
Transformar un sector estático
"La industria sigue construyendo prácticamente igual que hace 50 años. Hay nuevas herramientas, pero el modelo es igual, esto es el que queremos cambiar partiendo de un proyecto que irá evolucionado a medida que se tienen los datos y no según dice un plano y un diseño inicial", reivindica el CEO.
Aliguer: "Muchas venture capitales, palancas de inversión y aceleradoras han tenido verticales centrados en smart cities, pero ahora añaden también el de la ingeniería civil y construcción"
De Santos afirma que las emprendidas constructoras saben que el cambio es inminente, por el que ya están haciendo las primeras jugadas para no quedarse atrás. De aquí que tanto él como Aliguer consideren que este es el momento oportuno para lanzarse al mercado y aprovechar la oleada. "Muchas venture capitales, palancas de inversión y aceleradoras han tenido verticales centrados en smart cities, pero ahora añaden también el de la ingeniería civil y construcción", añade el COO. Un buen ejemplo de la presa de conciencia es el acuerdo que firmaron Acciona y la Mobile World Capital para incluir el 5G en el desarrollo de pilotos industriales aplicados a sectores de actividad de la constructora.
Es lógico, pues, que hayan nacido con el alma de ser internacionales desde el primer momento. El 80% de la facturación de las grandes compañías del ámbito en España proviene de las obras que tienen al exterior, por el que saben que si su tecnología funciona, atraerá nuevos clientes de todas partes. Tampoco los asusta el hecho de operar en un sector que todavía arrastra la cruz de la crisis y la burbuja, sobre todo por el hecho este de saber que gran parte de la actividad se da en territorio exterior. "Hay muy potencial en Colombia, Guatemala, Australia... las empresas se abren en el mundo y ven que tienen que innovar para no quedarse atrás. No quieren que aparezca el Airbnb de la construcción", comenta De Santos.
De la mano de los grandes
Son dos ingenieros que se conocían de la carrera que han pasado más de siete años haciendo investigación a la universidad. Tenían el conocimiento, pero del sector, no del mundo de la emprendeduría, de las startups, de financiación y todo el que hay que saber para comenzar el camino con buen pie. Vieron la oportunidad de negocio y se lanzaron, con la suerte que es un ámbito donde hay que ir del brazo de las grandes compañías para tener presencia. "Nos ha ayudado mucha gente del entorno, pero ha sido especialmente importante recibir inversión de Cemex, que es la tercera cimentera más grande del mundo. Es una alianza estratégica por el dinero y por la cartera de clientes, experiencia y conocimientos que aportan", reconoce el CEO.
Sobre esto, el COO, Aliguer, añade que si quieren que Saalg sea disruptiu y cree valor, "hay que ir de la mano de un grande". "Si no lo haces, es prácticamente imposible que entres".
A esta inyección de capital se tiene que sumar otra de la Mobile World Capital y la financiación de business angels, el que suma 250.000 euros en la fase seed de la compañía.