El mundo está, vivió y avanza, y la vida es un reto continuo. Esto ha sido, es y será siempre así. Ahora nos toca vivir lo que nos toca vivir, y no hay que hacer otra cosa que adaptarse, gestionarlo y seguir adelante. En los últimos 100 años han pasado muchas cosas: la mal denominada gripe de España, la 1ª y 2ª Guerra mundial, la Guerra civil, países con dictadores, esclavitud, muro de Berlín, hambre en el continente africano (todavía no resuelto), refugiados, atentados, ETA, las enfermedades del sida y el ébola, crisis del petróleo, hundimiento de la bolsa, ... Siempre ha habido cosas y seguirá habiéndolas.
Y ahora nos llega un tal Covid, esto es lo que toca ahora, no es nada anormal si observamos con detenimiento la historia y esta es la de ahora. La que nos preocupa y ocupa y además nos cae muy cerca y nos tiene descolocados, pero sobre todo porque es la que nos toca vivir ahora. ¿La receta psicológica? Aceptar lo que tenemos y aprender a convivir con esto, dar normalidad a algo que no nos gusta. Lo contrario nos provoca desajustes: ansiedad, desasosiego e infelicidad, y ¿por qué no decirlo? miedo o temor a lo desconocido.
"¿La receta psicológica? Aceptar el que tenemos y aprender a convivir con esto, dar normalidad a algo que no nos gusta"
¿Os imagináis lo que pudo ser una guerra, sin hogar donde dormir, conviviendo con el miedo de no tener un mañana, sentirse perseguido por ideas, religión o raza, pasar hambre, ver morir a gente próxima y querida, no tener recursos económicos?… Qué duro, ¿no? Ahora, con el Covid nos piden que nos quedemos un tiempo más en casa. Posiblemente con la nevera llena, con Movistar y Neflix, pudiendo continuar trabajando desde casa, mirando películas y deporte, con reuniones limitadas a seis personas, comunicándonos cada día con quien deseamos, pudiendo hacer deporte, confort.… ¿qué duro, verdad? Sé que hay gente que no tiene la posibilidad de todo esto y no pretendo banalizarlo, pero, la gran mayoría sí… ya está bien, ¿no? Quizás es hora que seamos más condescendientes, y si nos piden que salgamos menos, que vayamos a menos lugares o sólo a entornos seguros, hagámoslo. Porque esto es lo que hay que hacer…esto es lo que hoy es nuestra normalidad, la nueva normalidad.
Todo esto pasará, vendrán tiempos mejores y, claro, otros problemas, porque esto es la vida misma. Esperemos haber aprendido cosas, si bien posiblemente no nos sirvan para las cosas que pasarán más adelante, pero también tendremos que volver a adaptarnos a lo que venga, como ha ido tirando la especie humana desde su creación. A continuación, detallo alguna recetas y comportamientos que estaría bien que nos los pudiéramos ir ya aplicando:
- Adaptarnos a los cambios: Aporta riqueza y crecimiento personal.
- Ser más generosos con los otros: Esto si que compensa; siempre hay alguien que está peor que tu. Cómo decía monseñor Casaldaliga: "Cuanto más doy, más tengo".
- Dejar de ser tan individualistas y egoístas: Pensar algo más en el prójimo y en el bien colectivo.
- Ser obedientes y respetar las instrucciones de los especialistas: Nos piden que no salgamos de casa y sugiero que hagamos caso un tiempo. ¿Tan difícil es?
- Aprender a vivir con un poco de incertidumbre y saber ser felices igualmente con esto.
- Actitudes positivas y alegres: Alejémonos de los cenizos.
- Potenciar la humildad. ¡Qué gran virtud!
- Innovar; reinventarse. Salir de la rutina y el confort.
- Escuchar más a los otros, como los grandes sabios.
Importante, recordad: "Esto es lo que nos toca vivir hoy". Tengo una muy buena noticia: Si todos ayudamos, ¡ya queda mucho menos!! Ánimo y a ser felices, que en la vida estamos de paso.