Se acerca la última fecha navideña del calendario, y con ella, se pone fin al derroche, a los compromisos y toca tomarse de verdad (ahora sí) los propósitos de año nuevo. El 5 de enero al atardecer toca comer el tortell de Reyes, una costumbre que algunos celebran en familia y otros entre amigos. Este dulce hunde sus raíces muchos siglos atrás, pero en las últimas décadas ha evolucionado en sus rellenos: nata, crema, chocolate... En cambio, las "sorpresas" que esconde se repiten año tras año con figuretes de Belén, muñecos infantiles y, no hay que decirlo, la temida haba. El horno Lozano Reposteria Artesanal de Elche decidió hace 20 años darle un toque picando al brioix; no en el sabor, sino en los sorpresivos objetos sexuales que se encuentran en su interior.
Os imagináis terminar una cena entre amigos el sábado con el colofón del tortell, y que en lugar de aparecer un rey de oriente, un muñeco de La Patrulla Canina y la haba, haya una sortija vibrador, un dado con posturas, un tanga, bolas chinas o un DVD porno? Esa es la propuesta de la empresa ilicitana desde el año 1998. "En aquella época fue totalmente diferente y transgresor y hoy, cuando lo explico, la gente todavía no se lo cree", explica José Luis Lozano, gerente de Productos Lozano.
Cuenta que la idea surgió porque "la Noche de Nadal es más familiar, pero la Noche de Reyes se queda más con los amigos". "Queríamos hacer algo diferente, graciosa y divertida para otro público, más de colegas o parejas", añade.
Los tortells eróticos los venden sobre todo en la provincia de Alicante en supermercados Hiperber de Elche y tiendas y confiterías (bajo demanda), y también llegan a las comarcas de Valencia y en Murcia. Los ingredientes y sabores son los mismos que los de los tortells convencionales, a pesar de que cambia la presentación: los dulces eróticos tienen forma de corazón y sólo está disponible en el formato más grande, el súper. Se pueden encargar y solicitar los regalos concretos que quieren esconderse.
El consumo de tortells eróticos, sin ser extraordinario, se mantiene estable y en ligero incremento. De los 16.000 brioixos que fabrica la empresa estos días, alrededor de 1.000 son eróticos. Sólo los peores años de la crisis redujeron la demanda porque son más caros por el valor de los regalos. Si el habitual tortell de Reyes súper lo venden por 13 euros, el erótico sube a 25 euros. El año pasado trabajaron con la tienda erótica online, también alicantina, Diversual; este año han buscado los productos por su cuenta.
Desde la empresa dicen que son los únicos que hacen tortells eróticos que se distribuyen en grandes superficies. Y tampoco es una oferta muy extendida que se pueda encontrar fácilmente en cualquier horno tradicional.
Los mejores tortells de Alicante
Cada año se premien los tortells más muy hechos de Alicante en dos concursos: uno que reconoce los dulces de las comarcas del Valle del Vinalopó (Alto, Medio y Bajo), dado por la Asociación Provincial de Panadería de Alicante, y otro a cargo del Gremio de Panadería y Pastelería centrado en la comarca de la capital, l'Alacantí.
La 13a edición del concurso provincial ha premiado, en este orden, al horno Pedro Amat de Petrer, al horno Aracena de Elda y al horno Romero de Elda. Por su parte, el 18é entrega de galardones en l'Alacantí ha reconocido al horno La Tostada Dorada de Sant Vicent del Raspeig, al horno Hermanos Guardiola de Alicante y al horno San Vicente de Alicante. Los premios no tienen asignación económica, pero sí una placa conmemorativa que es un importante reconocimiento para los establecimientos.
La casca, la tradición más valenciana
Ni eróticos ni con figuretes del Belén. Si alguien quiere adentrarse en la tradición más valenciana por Reyes, todavía encontrará en algún horno del País Valenciano la casca, un dulce similar al tortell pero de raíz morisca y hecho con almendra, moniato, azúcar y huevos. Según se ha publicado ampliamente, el tortell tendría un origen occitano y entró después de la Batalla de Almansa, a pesar de que no se popularizó y relegar a un segundo plan a la casca hasta los años 60.