Nueva raza de cerdo para abrir mercado
El cruce, que quiere volver al sabor tradicional, se dirige al cliente creciente de la alimentación natural y de calidad
En Cataluña hay casi tantos habitantes como cerdos, según informe anual de 2011 del Observatorio porcino. Apostar por este sector es invertir en un negocio en el cual Cataluña sobresale. Casi produce la mitad de la producción de carne de cerdo del Estado y concentra el 55% de los productos ganaderos catalanes.
Una clientela exigente
Quién compra esta carne son secciones gourmet de ciertos negocios de alimentación y elaboradores de embutidos artesanos. Diferenciarse claramente de la distribución moderna es un valor muy apreciado por estos productores, como Pilar Puig, que regenta la tienda de víveres Can Pilar, en Aviñón, y que elabora productos como la morcilla de ral.
"Desde que elaboramos los productos con este tipo de carne, nos han aumentado los clientes foráneos que nos compran por internet y, incluso, que se desplazan expresamente aquí para poder comprar estos productos", explica la vecina de Aviñón, en el Bages.
La innovación surgió el 2009 al matadero de Aviñón y lo llevó a cabo la familia Roma, que gestiona varias empresas del sector càrnic. El cruce para crear la nueva raza de ral nació porque "muchos de los clientes, especialmente pequeños elaboradores, pudieran diferenciarse en la calidad de suyos productos", explica Pere Roma, uno de los impulsores.
Alternativa a la producción en masa
Querían diferenciarse del cerdo blanco, con el que hasta ahora se ha conseguido aumentar la producción y bajar costes, pero en detrimento del sabor tradicional. El cerdo ral, un cruce entre un macho Berkshire y una hembra Duroc, es más greixós.
entran dos factores determinantes, según Pere Roma: la genética y la alimentación. "El ral de Aviñón come pienso especial en base de trigo", señala y añade que engorda de forma más lenta. Con el cerdo ral, los productos vuelven a los orígenes.