HP ha presentado el primer sistema de impresión industrial 3D para la producción industrial

Innovación

HP patenta la primera impresora 3D industrial

La capacidad de producción es diez veces más rápida que la tecnología creada hasta ahora y permite reducir a la mitad los costes

Lo centrod 'HP de Sant Cugat del Vallès ha patentado el primer sistema de impresión industrial 3D preparado para la producción, que será más rápido y económico que la tecnología utilizada hasta ahora. Así lo ha anunciado el director general mundial de impresión 3D de la multinacional, Ramon Pastor, que ha detallado que permitirá hacer piezas de calidad industrial "diez veces más rápido que la tecnología más rápida hasta ahora y reducirá a la mitad los costes" en querencias cortas y medianas, y ha asegurado que significará un antes y uno después.

A final de este año se lanzará la impresora HP Jet Fusion 3D 4200 y el 2017 la impresora HP Jet Fusión 3D 3200, dos productos que permitirán hacer pequeños engranajes hasta estructuras flexibles.

Para lo cual han dispuesto de "partners verticales de varios sectores industriales como por ejemplo BMW, Nike y Siemens", entre otros, ha enumerado Pastor, a pesar de que también se prevé trabajar en el ámbito aeroespacial, el sanitario y se trata de una oportunidad para las pymes. Además, ha dicho que el centro de la compañía en León ha contribuido en el proceso del software con ingenieros de la planta castellana.

Descartan el mercado asiático
Los mercados en los cuales se empezará a introducir serán "los que están más cerca", ha apuntado el director de marketing mundial de impresión 3D, Álex Moñino, como Europa y los Estados Unidos, y ha descartado el asiático, alegando la complejidad de montar una escalera de ventas en esta parte del mundo y la presencia d 'un país como Japón, a pesar de que ha matizado que hay un equipo trabajando en esta materia en Singapur.

Pastor ha pronosticado que con cinco años se podrán hacer "piezas personalizadas, bajo demanda" y, en una década, los cambios serán importantes, ha calculado, equiparando la llegada al usuario como los actuales sistemas de fotollibre, en que el cliente hará una petición y recibirá el producto en su domicilio.

No ha querido detallar ni el personal que se ha dedicado a trabajar en esta tecnología ni a la inversión hecha "por un tema de confidencialidad", a pesar de que ha explicado que se ha construido en Sant Cugat, en un edificio para probar los prototipos, y ha asegurado que la inversión en R D anual supera los 60 millones de euros anuales.

También ha augurado un nivel de contratación para este 2016 "semblante a la tónica de los últimos años o se puede incrementar", es decir, alrededor de unos 200 nuevos trabajadores.