Fútbol femenino: cuando la línea de salida te pone en desventaja y, aun así, triunfas

Los puntos clave y las decisiones que han marcado los pasos previos hasta los resultados obtenidos esta temporada

Recepción oficial del equipo femenino del FC Barcelona en el Palau de la Generalitat, después de ganar tres títulos esta temporada | Cedida Recepción oficial del equipo femenino del FC Barcelona en el Palau de la Generalitat, después de ganar tres títulos esta temporada | Cedida

Todos hemos visto estos días cómo los medios de comunicación recogían la gesta histórica que ha conseguido el equipo femenino de fútbol del FC Barcelona, alzando las copas de todas las competiciones que ha jugado: Liga, Copa de la Reina y Champions. A este triplete cabría añadir la Copa de la Reina de la edición 2019-2020 que, por la pandemia, quedó pospuesta hasta marzo de 2021. Una temporada perfecta y digna de ser examinada.

Precisamente para analizar en detalle y conocer de primera mano el trabajo que se esconde tras estos logros, el pasado martes, 8 de junio, tuvimos el placer de contar en las aulas de ESIC Barcelona con la presencia de Gonzalo Rodríguez y Rubén Jiménez, dos de los integrantes del cuerpo técnico que ha contribuido a la consecución de los citados títulos; una pieza más de un complejo engranaje al servicio del equipo. En calidad de team manager y kit manager, respectivamente, ambos profesionales compartieron su experiencia con los alumnos del Máster en Dirección de Marketing Deportivo, en una sesión dinámica, cargada de datos, información y anécdotas, y que acabó con una amplia ronda de preguntas.

En la sesión se persiguió analizar no únicamente el qué, sino más detalladamente el cómo. Porque lo más importante no es lo que se ha conseguido (sin restarle ni un ápice de mérito), sino todo lo hecho previamente para poder alcanzar un hito de tal magnitud. Así, Rodríguez y Jiménez mostraron a nuestros estudiantes la realidad diaria de un equipo de alta competición, con todas sus particularidades. Al ver en pantalla completa el calendario anual, con las distintas competiciones, entrenos y compromisos, se puede comprender realmente el nivel de esfuerzo y sacrificio constante que se requiere a esos niveles competitivos. Y, en una sociedad cada vez más marcada por lo efímero, la volatilidad, y la búsqueda de la inmediatez, es necesario pararnos a reflexionar sobre la importancia de la perseverancia como valor clave para la consecución de cualquier meta a medio o largo plazo, y recordar que la operativa siempre debe estar al servicio de la estrategia.

A muchos niveles, estamos viviendo en primera persona una época de cambios, con variaciones notables en los patrones de consumo

El contenido de la sesión permitió a los alumnos entender el fenómeno en toda su globalidad. Con una visión estructurada de la historia reciente del equipo femenino del FC Barcelona, y contextualizando el entorno, pudieron identificar los puntos clave y las decisiones que han marcando cada uno de esos pasos previos hasta los resultados obtenidos este año. Visto en perspectiva, es espectacular el nivel de crecimiento que ha tenido la categoría femenina, no sólo en el club, sino a nivel estatal, europeo y mundial. Las cifras que se barajan en los contratos se han multiplicado en los últimos dos años, y el seguimiento del fútbol femenino no ha hecho más que crecer, alimentando una espiral que lleva a su vez al crecimiento de las inversiones. Todo ello nos demuestra que, a muchos niveles, estamos viviendo en primera persona una época de cambios, con variaciones notables en los patrones de consumo, y que la sociedad en su conjunto está cambiando de forma activa sus preferencias. Y como no podía ser de otra manera, todos los cambios traen consigo un conjunto de nuevas oportunidades, listas para ser explotadas por aquellos que las sepan leer y entender con mayor antelación y acierto.

Por ahora, todos los futboleros celebramos el triunfo, junto con las jugadoras y todo el equipo técnico que, por cierto, justo la semana anterior recogían en Madrid la Placa de Oro al Mérito Deportivo por parte del Consejo Superior de Deportes, y el viernes de esa misma semana estaban en un reconocimiento oficial organizado por las instituciones en el Palau de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona. Nada hay más humano que la celebración. El triunfo no tiene sentido si no es para compartirlo. Y al compartirlo, no solo crece, sino que adquiere una utilidad mayor: se convierte en inspiración.

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