Xavier Marcet, fundador y presidente en Barcelona Drucker Society | Cedida

INNOVACIÓN

Marcet: "La innovación no es una borrachera de tecnología"

‘Innovación en el 22@: impacto y previsiones’ a debate en Barcelona en medio de conceptos como la sostenibilidad, las oportunidades y la empatía

"Elon Musk no es un referente para nosotros. Puede ser uno de los empresarios con más dinero del mundo, pero no es un modelo en nada. Debemos sumar ambición y humildad e inspirarnos de los mejores para crear ecosistemas singulares y europeos", apunta Xavier Marcet, fundador y presidente en Barcelona Drucker Society y opinador de VIA Empresa en el acto Innovación en el 22@: impacto y previsiones celebrado en Barcelona para visibilizar el impacto de la innovación en Catalunya.

La paciencia en un entorno innovador es primordial, así como la apuesta por un capital paciente. “Es verdad que nos gustaría tener mucho más impacto e ir más rápido, pero debemos dejar de mirar el entorno de forma pesimista y negativa. Creemos que todo debe avanzar en menos de tres años y no es verdad, sino que lo pregunten en Silicon Valley”, continúa el consultor.

Més info: Catalunya: el reto del crecimiento

Es importante no obsesionarse por la innovación y que acabe convirtiéndose en una "palabra vacía". Para el experto "es crucial el futuro de nuestras empresas y país". "No tenemos suficiente con levantar oportunidades, debemos concretarlas. Un territorio es innovador cuando es capaz de tener un pacto", continúa Marcet. "Una empresa vive de lo que le compran y no de 500 prototipos", remarca.

El guiño a los emprendedores

"Los emprendedores son gente que ha tomado una decisión en su vida y es que el futuro lo dirigen ellos. Hay profesionales que lo hacen con una startup, en una organización, en una empresa o en la administración y es gente que asume que el futuro no es una carambola", continua.

Para Marcet "deberíamos aprender mucho de todos e inspirarnos de ellos, pero crear el propio modelo". Y lo tiene claro: "En Catalunya consideramos que no toda la innovación es buena". Y entre los elementos clave se encuentra la apuesta por la sostenibilidad, la privacidad de datos y no si vale si la innovación genera una gran destrucción de capital social.

Marcet: "No tenemos suficiente con levantar oportunidades, debemos concretarlas. Un territorio es innovador cuando es capaz de tener un pacto"

Como evidencia Marcet "no todo puede ser a expensas de todo". Es decir, es vital generar un modelo en el que la innovación ayude. "¿Por qué innovamos en las empresas?" pregunta el consultor. "Para ser consistentes y tener futuro. Evolucionar y servir a los clientes pasa adelante", responde.

No es la creatividad ni los MVP ni la propuesta de valor el problema de la innovación. "La gran dificultad es que la innovación sirva a la gente. Para mí tiene más sentido ir del cliente a la tecnología que a la inversa". "Y, sobre todo, preocuparnos de resolver un problema, una necesidad o aspiración y que lo compren. Que no te digan que lo comprarán en unos años".

Marcet: "En Catalunya consideramos que no toda la innovación es buena"

Y el autor concluye: "La innovación no es una borrachera de tecnología, es empatía. Necesitamos sumar conocimiento, propuesta de valor y oportunidad". "En Europa somos pequeños y hemos cometido errores garrafales, como por ejemplo la crisis de los microchips no tiene nombre, debemos reaccionar y poner más ambición. El liderazgo y la complicidad directiva es más importante que tener el producto perfecto".