El producto interior bruto catalán creció el 2021 hasta los 244.172 millones de euros. Esto supone un crecimiento del 5,8%, una décima menos que el esperado según los datos del Institut Català d'Estadística. Según afirma Idescat, el consumo de los hogares, con un incremento del 5,2%, ha sido lo principal factor para la aceleración de la economía del país, acompañado por la formación bruta del capital, que ha crecido un 8,1%.
A pesar de haber sido por debajo del esperado, la recuperación de la economía catalana cambia la bajada del 8,9% que sufrió el país el 2020 por la crisis socioeconómica provocada por la pandemia. Catalunya ha crecido en ocho puntos básicos más que la media del Estado español (5%), y un 0,5% por encima de la media de la Unión Europea (5,3%).
Si se observan los sectores industriales concretos, ha sido la rama de los servicios la que ha mostrado un crecimiento más importante, con una subida del 6,3%, seguida por la industria, que muestra una actividad económica un 5,3% más alta que el 2020. Por su parte, construcción y sector agrario, con aumentos del 1,6 y el 1,5% respectivamente, muestran reactivaciones más modestas.
En el caso de los servicios, muestra un especial buen comportamiento la hostelería, con un crecimiento del 14% interanual – un aumento relativo que toma como referencia lo prácticamente parado sector del año 2020. Por su parte, el ritmo de los sectores industriales lo marcaron las empresas químicas, metalúrgicas y alimentarias, que compensan el retroceso del sector del automóvil.
En cuanto al cuarto trimestre del 21, el crecimiento interanual se ensarta hasta el 6,3%, un repunte próximo a los tres puntos porcentuales respecto del trimestre anterior. La mayor parte de los indicadores internos mostraron buenos comportamientos durante el periodo, con un crecimiento de la demanda interna del 3,4%, especialmente marcada por el consumo de los hogares (3,5%) y la formación bruta de capital (4,7%).