En 2019 se presentaron 403 EREs en Catalunya que afectaron 10.059 trabajadores, lo que implica un aumento interanual del 49,81% y del 78,64%, respectivamente, según la Estadística de Regulación de Ocupación del Observatorio del Trabajo y Modelo Productivo.
Del total, 182 fueron de extinción, un 76,7% más, y comportaron el despido de 6.179 trabajadores, un 161,93% más que el 2018. De los restantes, 182 fueron de suspensión de contrato y afectaron 3.490 empleados y 39 de reducción de jornada para 390 personas.
La cifra total de EREs es la más alta desde el 2016, cuando fueron 517, y en el caso concreto de los de extinción es la más alta desde el 2014, cuando fueron 218. En cuanto a los trabajadores afectados, 6.915 fueron hombres y 3.144 mujeres. En el caso de los de extinción, los hombres eran 4.116 y las mujeres 2.063, un 226,67% y un 87,72% más que el año anterior.
En diciembre, se finalizaron 35 procedimientos que afectaron 1.194 empleados. De estos, 20 fueron de extinción y afectaron 950 trabajadores. Estas cifras implican una reducción de los EREs en comparación con el mes anterior pero supone un aumento si se coge como referencia el diciembre del 2018. En concreto, el número total de EREs subió un 45,83% y los de extinción subió un 185,71%.
Por territorios, 30 de los procedimientos se dieron en las comarcas de Barcelona, cuatro en las de Girona y uno en las de Lleida.