Pluriocupats: multiplicarse para llegar a final de mes

España tiene mucha menos pluriocupación que los países europeos más ricos, pero si en Suecia u Holanda puede ser una opción laboral atractiva, aquí todavía es sinónimo de precariedad

La pluriocupación es un efecto de la crisis e implica condiciones precarias? En España es así en la mayoría de los casos, al contrario que en los países más ricos de la Unión Europea. Un estudio de Adecco aporta una serie de datos que rompen mitos sobre los presuntos vínculos entre pluriocupación y recesión económica al conjunto de Europa. Los sindicatos alertan, pero, que en España tener más de un trabajo no solo ser una decisión libre del trabajador dentro del mercado laboral, sino una penuria obligada para conseguir llegar a final de mes.

De hecho estos días, el artículo "Cuánto tiene que ingresar un autónomo para ganar 938€ al mes se ha convertido en viral. La denuncia de una trabajadora autónoma sobre los elevados impuestos que tiene que pagar para ser 'mileurista' ha tenido gran impacto a las redes sociales y ha reabierto el debate sobre la situación económica de quien trabaja por anticipado propio. 

Según el informe de Adecco, el número de personas pluriocupades (con dos o más trabajos, sea por anticipado propio o ajeno) es más alto en los estados europeos con salarios más elevados y porcentajes de paro más reducidos. España, que no cumple con cabeza de estas dos características, es a la cola de la UE en pluriocupats: sólo un 2,1% del total de trabajadores. La media a la UE es del 4%, y en países como Holanda llega al 9%. "La pluriocupación reducida en España es consecuencia de las altas tasas de paro, del limitado pes del trabajo a tiempo parcial y de la crisis que afecta el mercado laboral" resuelve Diego Barceló, investigador de Adecco y Barceló & Asociados.

La comparación con otros países europeos no se puede hacer tan sólo en porcentajes, sino en términos cualitativos. "La diferencia radica en la voluntariedad de la persona pluriocupada", asegura Cristina Faciaben, responsable de Socioeconomia del sindicado Comisiones Obreras (CCOO).

Dejando de banda las lógicas excepciones, a países como España el pluriocupat no logra esta categoría porque lo desee, sino porque los estragos de la crisis no le han dejado más remedio que multiplicarse laboralmente para llegar a final de mes. Just al contrario del que pasa en países como Suecia u Holanda , con porcentajes de pluriocupats que quatripliquen los de aquí, y donde el trabajo a tiempo parcial está mucho más establecido y puede resultar una fórmula atractiva para muchos trabajadores.

En los países más benestants del continente, en definitiva, el pluriocupat lo suele ser por decisión propia; en los más tocados por la crisis, lo es por obligación, en muchos casos después de ser víctima de una reducción de jornada y de sueldo a la empresa donde trabaja. "En nuestro caso la pluriocupación nos precaritza, tanto en sueldo como en condiciones de trabajo", destaca Faciaben.

Del ERO a la pluriocupación
A pesar de que el porcentaje de pluriocupats sea menor que el de la media europea, las circunstancias mencionadas hacen que esta sea una categoría en auge al Estado español. Un caso que ejemplifica muy bien quién son estos nuevos pluriocupats es el de Montse Valea. Vecina de Sant Pol de Mar (Maresme), trabajaba a jornada completa en una empresa de biotecnología con sede en Badalona. Ahora hace un año, la empresa se vio obligada a hacer un ERO después de que no consiguiera financiación privada para sacar al mercado el producto en el que hacía años estaba trabajando, a pesar de que había demostrado su eficacia en el laboratorio.

13 trabajadores fueron despedidos y otros, como la misma Valea, sufrieron una reducción de jornada. "Pasé de trabajar 35 horas en 14, dos días a la semana", explica. La correspondiente reducción de sueldo podía compensarla con la parte proporcional de la prestación de paro, tal como prevén estos Eros, pero prefirió "buscarse la vida", como dice ella, con un trabajo complementario.

Contratada y autónoma
Además de seguir trabajando al laboratorio badaloní, Valea trae ahora la gestión administrativa de tres empresas. Para poder hacer este segundo trabajo se ha tenido que dar de alta de autónomos, a pesar de que al laboratorio donde le han reducido la jornada trabaja como contratada. La Ley de la Emprendeduría, aprobada en 2013 por el Gobierno español, prevé que un trabajador asalariado que cotice en el régimen general de la Seguridad Social pueda a la vez ejercer otros trabajos como autónomo, con deducciones de hasta el 50% de la cotización en el régimen de trabajador por anticipado propio.

Esta doble condición es plenamente legal, pero a la Oficina de Trabajo se lo pusieron algunas pegas. "Estaban bastante confundidos, y finalmente tuve que recurrir a un gestor privado para acabar de regularizarlo", explica Valea. La burocracia estatal está todavía en proceso de adaptación de estas nuevas realidades laborales que rompen esquemas. También hay que tener presente que cuando se cumplen dos años como autónomo se pierden los derechos que se tenían como trabajador asalariado de cara a percibir la prestación de paro acumulada.

Altamente calificados... y pluriocupats
A pesar de que se suele vincular la pluriocupación con los sectores tradicionalmente más castigados y con un nivel formativo más bajo, la realidad es distinta. Desde CCOO apuntan, como demuestra el caso de Valea, que "profesionales altamente calificados también se ven abocados". Faciaben cita casos como por ejemplo los arquitectos, que a raíz de la crisis del totxo se ven obligados a combinar un salario precario en un estudio con proyectos por anticipado propio como autónomos. O los profesores interinos, que a menudo tienen que buscar trabajo en verano y actividades complementarias durante el año porque nadie los garantiza que en septiembre vuelvan a tener plaza a algún centro educativo.

El portavoz de Adecco afirma que "no hay diferencias relevantes en el nivel educativo y situación profesional del pluriocupat en España y al conjunto de la UE". Según el estudio de la empresa, la mayor tasa de pluriocupación al Estado español se encuentra en ocupaciones profesionales como por ejemplo médicos, abogados o ingenieros, por ante los trabajadores de tareas básicas (limpieza, peones...) y de directivos. Al conjunto de Europa la situación es misma. El principal desajust respecto a la mayoría de estados vecinos, añade Barceló, se encuentra en "el grado de inserción que tiene esta modalidad laboral, que en España es bajo".

Flexibilidad obligada
Volviendo al caso de Valea, ella se siendo relativamente satisfecha de su nueva experiencia como pluriocupada. "Las empresas me han dado bastante flexibilidad, puedo adaptar el horario a mi conveniencia y también trabajar desde casa", explica esta madre de dos hijos. La situación actual, pero, también lo obliga a tener mucha más movilidad que antes, puesto que su puesto de trabajo se ha multiplicado por cuatro (casa suya y oficinas en Badalona, Barcelona y el Prat de Llobregat).

La multiplicación de los desplazamientos es, por lo tanto, otro factor asociado a la precarització de la pluriocupación, puesto que el trabajador tiene que destinar más tiempo y dinero a llegar a su lugar de trabajo. La flexibilidad antes mencionada es, en todos los sentidos de la palabra, imprescindible para sobrevivir en un escenario donde se corre el riesgo que el trabajo se te coma la vida personal. "Tienes que estar preparada por todo, y saber reorganizarte mentalmente porque la situación no te sobrepase", concluye Valea.
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