No todo el mundo tiene tiempo para ir al gimnasio ni bastante dinero para pagar las cuotas mensuales o anuales que se piden. Esto, pero, no quiere decir que uno no quiera ponerse en forma. Para dar solución a esta dicotomía, hace cerca de dos años nació Ictiva, un proyecto liderado por cuatro socios que querían trasladar el modelo del gimnasio físico al mundo online.
"Queríamos que la parte de la población que no hace deporte tuviera la posibilidad de activarse. Por eso pensamos que, con Internet, podríamos crear una plataforma que diera acceso a todo el mundo y que fuera barata", explica Jordi Marsal, socio-fundador. Sus planes van desde los seis euros mensuales hasta los ocho, en función del tipo de tarifa escogida.
"Queríamos que la parte de la población que no hace deporte tuviera la posibilidad de activarse"
La plataforma ofrece vídeos de aproximadamente 20 minutos de 21 disciplinas diferentes, adaptadas a todos los niveles y con ejercicios diversos para trabajar cada parte del cuerpo en función de los objetivos. "Traemos casi 1.000 píldoras grabadas y tenemos también para niños y bebés, para personas que empiezan de 0 y quieren ir avanzando...", señala.
Además, ofrecen un servicio de nutrición con planes de dietas estándares y también otros personalizadas para el usuario, como sistemas de entrenamientos diseñados para cada cual. Todo se hace de la mano de profesionales, colaboran con una asociación de nutricionistas y dietistas que marca las pautas a seguir. Y para evitar que uno se aburra al verse ante la pantalla haciendo ejercicio, tienen un motivador que hace el seguimiento de la actividad del usuario y pulsaba su constancia.
A pesar de que tienen variedad de perfiles, su público principal son mujeres de entre 25 y 45 años que buscan aeróbic, danza del vientre, pilates o yoga. Esto hace que, según Marsal, el aeróbic sea la actividad más demandada y, en cuanto a las dietas, los planes de 15 días. "La gente quiere resultados rápidamente", comenta.
Las puntas de registro se notan en tres momentos del año: después de Nadal, a la primavera con la operación biquini y en septiembre, cuando todo el mundo vuelve a la actividad y se marca nuevos objetivos.
Velar por el trabajador
Ictiva Work es el otro segmento de negocio que tienen entre manso. Ofrecen a las empresas la posibilidad de mejorar la salud de los trabajadores con planes de ejercicios físicos y mentales o dietas. Los trabajadores reciben el servicio gratuitamente, puesto que lo cubren las corporaciones, las cuales se aseguran que pueden disminuir el número de bajas y problemas de la plantilla.
Entre sus clientes ya se encuentran empresas como Gas Natural, Simon o Áreas.
A la busca de financiación
"Siempre hemos avanzado haciendo hacer prueba-error, hemos salido adelante con nuestros recursos económicos, pero ahora necesitamos una ayuda para seguir creciente". Este es el motivo por el cual Marsal explica que se han presentado a la tercera edición del Menorca Millennials, la primera desacceleradora mundial de startups, donde son uno de los 20 proyectos seleccionados entre cerca de 400 de todo el mundo.
"La empresa tenía que ser 100% nuestra hasta que los recursos propios dieran de sí y ahora ya hemos superado este punto"
Tal como explica el responsable de producto, la idea es encontrar la persona (o personas) dispuesta a invertir en Ictiva para tener los recursos suficientes para promoción y marketing. "Tenemos un producto consolidado, demasiado crítica y nos va bien. Pero sólo tenemos 145.000 personas registradas, para Internet esto no es nada, es un gra de arena", apunta. "La empresa tenía que ser 100% nuestra hasta que los recursos propios dieran de sí y ahora ya hemos superado este punto".
Se han puesto la cifra de dos millones de euros como la cantidad idónea para crecer bien. Para ampliar su presencia al mercado español y para pensar a traducir la plataforma a otros idiomas y abordar el exterior.
El equipo lo forman 10 personas y está liderado por los cuatro socio y fundadores: Orlando Pérez, Sergio Recio, Soli Zacal y Jordi Marsal. Trabajan con una treintena de especialistas, con los cuales graban los vídeos cada tres meses para actualizar las rutinas de ejercicios.
El 2016 facturaron 270.000 euros y este año prevén cerrar con 600.000 euros.