"De los fracasos acaban saliente victorias''. Con esta frase, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, se sumaba este martes por la noche a una corriente de opinión que gana adeptas: hay que implantar en Cataluña la cultura del fracaso. Precisamente Barcelona acogió la semana pasada la primera iniciativa Failcon en el Estado español, que quiere trabajar esta filosofía. Su promotor en España, Pedro Olivares, consejero delegado de Salto cono Red, cree que se tienen que llegar a incorporar los errores al currículum.
Hay cultura del fracaso en Cataluña?
Culturalmente aquí tenemos mucha presión del qué dirán. Cuando quieres emprender un proyecto es fácil que quién te eche atrás sea tu familia y tu entorno más cercano.
Una madre, por ejemplo...
La madre siempre pregunta "estás seguro hijo mío del que harás?". Además, aquí acostumbramos a estar muy arraigados en el territorio, no movernos mucho de nuestra región. En EE.UU. mucha gente cambia de estado y vuelve a empezar después de fracasar.
Sí que están acostumbrados, los norteamericanos?
No es que no los haga daño el fracaso, pero socialmente parece que hay más mecanismos para empezar de nuevo. Eso sí, al exportar aquí el Failcon tuvimos dudas, pero la respuesta ha sido muy positiva: 300 participantes, 18 ponentes... hay ganas de cambiar el chip.
Cuál es la filosofía?
Que tus errores son mis errores. Y al final no son tan diferentes!
En Barcelona, exportado por primera vez en el Estado...
Sí, viene de Silicon Valley, creado por Cassie Phillipps, y se han hecho iniciativas basadas en esta filosofía en París, Berlín, Oslo, Sydney, Singapur...
La intención de aceptar los errores está, pero cómo se aplica a la práctica?
El que hay detrás es el miedo y esto es humano. Se tiene que dar el paso, en lugar de caer en la queja o en la envidia. Hay muchos recursos hoy en día en el ecosistema emprendedor, como el BizBarcelona, como los servicios de promoción económica de los ayuntamientos, como ACC1Ó. También recurrir a otros emprendedores, preguntar, potenciar el networking, salir de casa.
Uno de los participantes dice que a casa sólo llegan facturas, multas y publicidad.
Y a veces ni esto, porque si tienes una multa es que has salir a la calle. En casa no puedes gestionar el miedo, está claro.
Es con la crisis que ha llegado esta mentalidad de superar los fracasos?
Sí. Nuestra media de edad es de cuarenta años. La gente se plantea o pongo en marcha algo o marcho fuera. Eso sí, muchos tienen experiencia directiva pero no empresarial: es diferente, porque aquí te juegas tus algarrobas.
Se tienen que incorporar los fracasos al currículum o todavía es temprano?
Para diferenciarse, ahora que nadie lo hace, es una buena opción. Atraerá la atención! Eso sí, hay que poner el error y que se aprendió de aquel fracaso en concreto.