Hoy en día el Big Data es un activo con un valor parecido al del petróleo. Gracias al Big Data podemos extraer una ingente cantidad de información que puede ayudar a predecir tendencias, tomar decisiones y en definitiva hacer crecer la empresa. De hecho, en la actualidad, muchos sectores relacionados sobre todo con el marketing, la salud o las finanzas, integran el Big Data con el objetivo de mejorar sus procesos y negocios. Pero que hay que tener en cuenta en el ámbito legal para implementar el Big Data a la empresa?
Teniendo en cuenta que la tecnología es mucho más rápida que las leyes, nos podemos encontrar con una serie de vacíos legales, puesto que las tecnologías Big Fecha constituyen un nuevo paradigma que se nutre principalmente de Internet y de los datos masivos. Ahora bien, si queremos actuar con precaución, tendremos que establecer una estrategia legal en paralelo a la estrategia de negocio.
Es decir, podríamos hacer algo pareciendo a un PIA (Privacy Impact Assessment), pero dónde no sólo tengamos en cuenta el impacto de privacitat que puede tener la implantación o aprovechamiento del Big Data a nuestro negocio sino también otros factores.
Qué es un PIA o estudio de impacto de la privacitat?
Un PIA es un estudio que permite analizar un proyecto en fase inicial con el objetivo de determinar qué impacto supone aquella idea para la privacitat y la protección de los datos personales. Nos ayudará a identificar los tratamientos de datos que queremos hacer, identificar los posibles riesgos que puede suponer, prever medidas antes de que se produzcan ciertas situaciones e incluso adoptar procedimientos de solución de problemas relacionados con la privacitat un golpe se hubieran producido.
Un PIA no sólo tiene por objeto el análisis del impacto en el tratamiento de datos que efectuaremos de posibles usuarios y/o clientes, sino también tiene en cuenta los riesgos corporativos. Por ejemplo, las medidas de seguridad informática a tener en cuenta; o legales, como el hecho que no estemos cumpliendo internamente con otras normativas aplicables, como la protección de datos o la ley de comercio electrónico.
Si queremos emplear el Big Data, es importante, pues que analizamos el que queremos hacer y como lo queremos hacer, para ver hasta donde llega y qué riesgos presenta para la privacitat de los usuarios afectados, o para la seguridad de nuestra empresa.
Hay que hacer otros estudios de impacto?
Pues sí. Si queremos extraer información otras fuentes, hace falta que tengamos en cuenta que, o bien son públicas (OpenData ) y entregas de todos los derechos y nos permiten hacerlo; o bien haría falta que respetáramos sus normas o reglas.
Así, por ejemplo, si queremos coger información de la página web de alguien otro sin su autorización, podemos estar infringiendo no sólo sus avisos legales (condiciones de uso, normas de la comunidad, etç), sino también incurrir en supuestos de infracción de la propiedad intelectual o derechos de autor, derechos de imagen o derecho de marcas, incluso. Hace falta que tenemos cuidado, puesto que este tipo de infracciones comportan sanciones económicas.
Emplear algoritmos por recavar información sin tener en cuenta de donde proviene, hacer web scraping, crawling o spidering software, entre otros, para extraer información, puede comportar una serie de infracciones legales que, en función de la empresa que lo implemente y el territorio donde lo haga y/o de donde lo extraiga, puede suponer el cierre de un negocio.
El Big Data será útil siempre que, como dicen los investigadores del MIT McAfee y Brynjolfsson, se gestione el cambio a las empresas teniendo en cuenta cinco aspectos críticos: liderazgo (hay que hacer las preguntas correctas y la estrategia adecuada para conseguir objetivos con el Big Data); gestión del talento; tecnología escalable y de fácil integración; toma de decisiones y cultura corporativa de implementar nuevas formas de analítica, es decir, una nueva educación dentro de las empresas que tenga el análisis de datos masivos.
Así pues, si queremos aplicar el Big Data a nuestro negocio no podemos obviar estos aspectos legales que pueden ser muy importantes también para una buena estrategia del negocio.
Teniendo en cuenta que la tecnología es mucho más rápida que las leyes, nos podemos encontrar con una serie de vacíos legales, puesto que las tecnologías Big Fecha constituyen un nuevo paradigma que se nutre principalmente de Internet y de los datos masivos. Ahora bien, si queremos actuar con precaución, tendremos que establecer una estrategia legal en paralelo a la estrategia de negocio.
Es decir, podríamos hacer algo pareciendo a un PIA (Privacy Impact Assessment), pero dónde no sólo tengamos en cuenta el impacto de privacitat que puede tener la implantación o aprovechamiento del Big Data a nuestro negocio sino también otros factores.
Qué es un PIA o estudio de impacto de la privacitat?
Un PIA es un estudio que permite analizar un proyecto en fase inicial con el objetivo de determinar qué impacto supone aquella idea para la privacitat y la protección de los datos personales. Nos ayudará a identificar los tratamientos de datos que queremos hacer, identificar los posibles riesgos que puede suponer, prever medidas antes de que se produzcan ciertas situaciones e incluso adoptar procedimientos de solución de problemas relacionados con la privacitat un golpe se hubieran producido.
Un PIA no sólo tiene por objeto el análisis del impacto en el tratamiento de datos que efectuaremos de posibles usuarios y/o clientes, sino también tiene en cuenta los riesgos corporativos. Por ejemplo, las medidas de seguridad informática a tener en cuenta; o legales, como el hecho que no estemos cumpliendo internamente con otras normativas aplicables, como la protección de datos o la ley de comercio electrónico.
Si queremos emplear el Big Data, es importante, pues que analizamos el que queremos hacer y como lo queremos hacer, para ver hasta donde llega y qué riesgos presenta para la privacitat de los usuarios afectados, o para la seguridad de nuestra empresa.
Hay que hacer otros estudios de impacto?
Pues sí. Si queremos extraer información otras fuentes, hace falta que tengamos en cuenta que, o bien son públicas (OpenData ) y entregas de todos los derechos y nos permiten hacerlo; o bien haría falta que respetáramos sus normas o reglas.
Así, por ejemplo, si queremos coger información de la página web de alguien otro sin su autorización, podemos estar infringiendo no sólo sus avisos legales (condiciones de uso, normas de la comunidad, etç), sino también incurrir en supuestos de infracción de la propiedad intelectual o derechos de autor, derechos de imagen o derecho de marcas, incluso. Hace falta que tenemos cuidado, puesto que este tipo de infracciones comportan sanciones económicas.
Emplear algoritmos por recavar información sin tener en cuenta de donde proviene, hacer web scraping, crawling o spidering software, entre otros, para extraer información, puede comportar una serie de infracciones legales que, en función de la empresa que lo implemente y el territorio donde lo haga y/o de donde lo extraiga, puede suponer el cierre de un negocio.
El Big Data será útil siempre que, como dicen los investigadores del MIT McAfee y Brynjolfsson, se gestione el cambio a las empresas teniendo en cuenta cinco aspectos críticos: liderazgo (hay que hacer las preguntas correctas y la estrategia adecuada para conseguir objetivos con el Big Data); gestión del talento; tecnología escalable y de fácil integración; toma de decisiones y cultura corporativa de implementar nuevas formas de analítica, es decir, una nueva educación dentro de las empresas que tenga el análisis de datos masivos.
Así pues, si queremos aplicar el Big Data a nuestro negocio no podemos obviar estos aspectos legales que pueden ser muy importantes también para una buena estrategia del negocio.
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