A quien no le han regalado nunca un ramo de flores que a la cabeza de tres o cuatro días ya no hace tilín? Quien no ha querido nunca obsequiar algún amigo que reside fuera con unas flores de temporada y se ha hecho atrás para no saber si aguantarían hasta su destino? La solución a estas situaciones las puerta The Colvin Co, una startup de Barcelona que se ha convertido en el marketplace catalán de las flores a domicilio.
El proyecto surge de tres jóvenes emprendedores, Andrés Cester, Marc Olmedillo y Sergi Bastardas, que tenían la idea de vender rosas el día de Sant Jordi mientras estudiaban en la universidad. A raíz de esta actividad "habíamos aprendido mucho la industria y detectamos que había una problemática en un sector que ya conocíamos", explica Cester. Después de estar unos años trabajando en el mundo corporativo y ver que había una necesidad al mercado, su actitud emprendedora trajo los tres jóvenes a lanzar el proyecto de las flores al mercado.
La startup nació el noviembre del 2016 con una inversión inicial de 300.000 euros de Business Angels y algunos fondos de capital riesgo. La financiación que recibieron los sirvió para "poner en marcha el proyecto y la plataforma tecnológica, desarrollar los primeros productos, empezar a vender y contratar un pequeño equipo para poner en marcha el test inicial", detalla Cester a VÍA Emprendida.
Cambiar el estatus quo del mercado
Su visión es cambiar el funcionamiento de la industria. Precisamente por este motivo el nombre que ha dado lugar a su proyecto tiene un carácter reivindicativo. La historia que hay detrás habla de Claudette Colvin, una mujer que luchó por los derechos civiles de los Estados Unidos en 60 y consiguió cambiar el status quo de una sociedad injusta donde no todos los ciudadanos tenían los mismos derechos. "Nosotros hemos querido hacer un paralelismo con nuestro proyecto, porque queremos cambiar la dinámica del sector", apunta Cester.
"Queremos construir ramos por todos los momentos y recuperar la magia que creemos que las flores han perdido", sentencia el cofundador. Tradicionalmente, sólo se regalaban flores en momentos puntuales, esporádicos o en ocasiones especiales, eran consideradas un producto de lujo y se asociaban a la idea de "conectar de hombre a mujer", continúa explicando Cester. Pero su producto apuesta para cambiar esta mentalidad y para ofrecer uno de duradero –los ramos aguantan hasta dos semanas-, a un precio ajustado -a partir de 25 euros, "casi un 50% menos que la media del mercado", y de calidad..
Uno de los elementos que proporciona la calidad de sus productos y que los ramos no pierdan vida a la cabeza de tres o cuatro días es la proximidad de los proveedores y agricultores con los cuales trabajan. Provienen del Maresme, algunos del resto del Estado español y otros, de Holanda.
Comprar a Colvin es fácil
Hacer una compra es muy sencillo. Sólo hay que entrar a su portal web y escoger el ramo que más gusta de acuerdo con un catálogo rotativo "muy muy seleccionado por nuestros artistas florales", subraya Cester. Este tipo de revista que ofrecen, sigue, "prioriza una excelente relación calidad precio y un diseño innovador en términos de formas de los ramos".
Un golpe hecha la selección del ramo toca escoger si se recibirá o se enviará el pedido. The Colvin Co envía el producto de forma gratuita en todo España en 24 horas. Y además, también hace envíos expreso y urgentes en Barcelona -y ahora también empiezan a implementarlo en Madrid- con un coste adicional de dos euros.
Por otro lado, el cofundador explica que a pesar de que l'usuario todavía no puede hacer una compra personalizando su ramo, sí que es una aportación interesante que están valorando. Del mismo modo, dentro de su plan tecnológico de este año están estudiando la posibilidad de crear una aplicación móvil para poder realizar las compras desde los smartphones.
Expansión internacional
The Colvin Co está instalada a Mercabarna Flor, en el municipio de Sant Boi de Llobregat, y cuenta actualmente con 10 trabajadores. Aun así, la startup acaba de cerrar una segunda ronda de financiación con un partner, Samaipata Venturas, de aproximadamente 400.000 euros. Con este incentivo, quieren duplicar el número de trabajadores de su equipo y acelerar el crecimiento. En los cinco meses de vida, pues, el proyecto ha recibido 700.000 euros de fuentes externas.
En cuanto a los clientes de The Colvin Co, tienen una tasa de repetición del 20% "es una cifra muy alta en comparación con el estándar del mercado", señala Cester. Y la mayoría de ellos son mujeres, a pesar de que cuentan con un perfil de usuario muy diverso. Otro de los disparos a destacar, explica el cofundador, es "que las cifras de ventas están muy equilibradas entre Cataluña y España". Por eso, los objetivos que se plantean a partir de ahora es conseguir a finales del 2017 y principios del 2018 llegar a Francia y en Italia. Eso sí, primero quieren acabar de consolidarse a la Península.