Reforma horaria: la hora de los agentes sociales

Corre ya un primer esbozo de la Ley de la Reforma Horaria entre los diputados y diputadas de la ponencia conjunta. Si todo va bien, podremos ofrecer un texto en el mes de julio. Ahora bien, somos conscientes las limitaciones de las competencias catalanas en materia laboral. Los agentes sociales tienen que ser conscientes de las diferencias significativas de los actuales horarios de la sociedad catalana en relación al resto del mundo, en los diferentes ámbitos de la vida cotidiana.

Patronales y sindicatos tienen que coincidir en que hay que colaborar en la aceleración de la necesaria reforma horaria, como parte de una intervención global en qué toda la sociedad se tiene que implicar y que traerá como consecuencia la mejora de la eficiencia y competitividad del conjunto del sistema económico y de la calidad de vida de las personas. Evidente que todo esto se tiene que hacer teniendo en cuenta que cada sector y tipo de actividades de empresas tienen unos horarios propios y que es imposible una uniformidad horaria.

El Acuerdo Interprofesional de Cataluña 2015-17 remarca, en su Capítulo 2 del Título VII, la importancia de la gestión racional y flexible del tiempo de trabajo. Esta gestión es clave para mejorar el clima y la satisfacción laboral, y para poder atender necesidades de la actividad empresarial como la productividad y la flexibilidad. Todo ello con el objetivo de encontrar el equilibrio entre la vida personal, laboral y familiar, en la medida que tiene una repercusión fundamental en la salud y en el bienestar de las personas.

Por lo tanto, en este marco, y siguiendo las recomendaciones del informe sobre la gestión del tiempo de trabajo remunerado en el contexto de la reforma horaria elaborado por el Consejo de Trabajo, Económico y Social de Cataluña (CTESC), y atendiendo, así mismo, a las Recomendaciones para la negociación colectiva en materia de gestión del tiempo de las personas trabajadoras que se consensuó ya para mejorar los contenidos de los convenios colectivos en materia de gestión del tiempo de trabajo, patronal y sindicatos se tienen que comprometer a trabajar para favorecer la consecución de los objetivos de carácter laboral que nos planteamos.

Ahora es la hora de los agentes sociales, ahora es la hora que sindicados y patronales vayan más allá y nos presenten un acuerdo que permita impulsar definitivamente la reforma horaria allá donde más puede producirse la aceleración: en el tejido productivo.