Helados Estiu, el triunfo de los helados del supermercado

Centrado en el canal hogar, ha empezado la internacionalización de los "mochi" con marca propia y ya factura 61 millones de euros fabricando sólo para Mercadona

M.José Félix, responsable de Helados Verano | Cedida M.José Félix, responsable de Helados Verano | Cedida

En plena ola de calor, una de las cosas que más apetece es comerse un helado. Nos gusta mucho hacerlo en la terraza de una heladería y compartir ese momento de placer con seres queridos. Ahora bien, es cierto que, por comodidad, cada vez consumimos más en el hogar: si a finales de los años 90 los helados que degustábamos en casa suponían sólo el 20%, hoy la cifra llega a cerca del 45%. De hecho, el panel de consumo alimentario en los hogares españoles advierte que este año el consumo se ha elevado un 5,8%: en total, se han consumido 143,38 millones de kilos de helados. Aquí es donde entra la historia de éxito de una heladera valenciana, Helados Estiu, que ha ido creciendo su facturación gracias a decisiones determinantes. Una de ellas, quedarse con sólo un cliente, pero del tamaño de Mercadona. Con todo esto cerró 2019 con una facturación de 61 millones de euros, comercializó 27,7 millones de litros de helado, ocupa a 172 trabajadores y lanzó a escala internacional su exitoso Wao Mochi. ¿Cómo ha llegado a este punto?

Vamos a los orígenes. Helados Estiu es una empresa con capital 100% valenciano que nació en 1983 de la mano de un grupo de heladeros locales en Riba-roja de Túria. Después de poner en marcha la aventura y de poner los fundamentos de lo que llegaría a ser una fábrica moderna, surgieron algunos problemas financieros derivados de la crisis de los noventa. Por lo tanto, pronto llegó la primera gran traba de la empresa, que se solucionó con una ampliación de capital en 1997 donde intervinieron, entre otros, las familias Pons y Félix, que son las que hoy poseen el 100% de la compañía. Con esta operación, María José Félix se convirtió en la directora general.

Cambios en 1998 y apuesta por un fuerte liderazgo

Según recuerda Félix, los cambios en la empresa pronto se hicieron notar: "En el año 1998 se hizo un estudio en profundidad del mercado, tanto español como europeo, y se llegó a la conclusión que en España todavía hay margen en este sector específico de la alimentación". Por otro lado, el consejo directivo apostó por "un fuerte liderazgo, ambiente comunicativo y trabajo en equipo como esos fundamentales". Félix asegura que de los orígenes "pervive el espíritu familiar y la proximidad, pero se han modificado los procesos productivos y el incremento de la I+D+i".
 

Fabricació de gelats de bombó d'Helados Estiu | Cedida
Fabricación de helados de bombón de Helados Verano | Cedida


Entre las decisiones de aquel año consta uno de los grandes aciertos de la empresa, según la directora general: "Buscar el desarrollo de la compañía en el mercado del hogar, y además, con productos de extrusión y minis". La crisis financiera de 2008 los llevó a tomar otra gran decisión que acompaña hoy los buenos resultados: "Hicimos un giro para combatir la crisis con mucha más eficiencia. Era necesario simplificar el proceso y abaratar los costes sin renunciar ni a la calidad de los productos y sin tener que prescindir de un solo trabajador. Así pasamos de 200 referencias a 22 y de muchos clientes a uno, Mercadona. Esto nos ha traído al hecho de que muchos de nuestros productos hoy sean líderes en venta en el canal hogar".

La directora general cree que "tenemos margen en el mercado europeo y capacidad competitiva. La innovación es una oportunidad" 

Como proveedor de Mercadona, Helados Estiu incrementó un 60% su beneficio neto en 2015. Por el contrario, Félix confiesa que un "error" lo cometieron en el año 2014, cuando cambiaron el 80% de la cartera de productos en un mismo año, cosa que resultó "excesiva en todos los sentidos".
 

Les noves instal·lacions a Xest de l'empresa Helados Estiu | Cedida
Las nuevas instalaciones en Cheste de la empresa Helados Verano | Cedida

 

Félix considera que la clave del éxito está marcada por su "relación como proveedores de Mercadona", que los hace "poner el foco en el consumidor". Además, ve esencial su orientación en el canal hogar con productos "que eran tendencia": "Minis, con tecnología de extrusión, especializándonos en algunas líneas de productos". La directora general cree que "el consumidor es cada vez más exigente" y "tiene más información", por lo cual "se tiene que ser muy transparente". En este sentido, afirma que hacen "mucho hincapié en la composición de los helados en cuanto a la elección de las mejores materias primas" y lo que buscan es, además de mantener los sabores tradicionales como el chocolate, la nata y la vainilla -"que son los más demandados"- trabajar en el departamento de I+D+i para "ampliar texturas y sabores para una parte de los consumidores a los que les gusta innovar".

La internacionalización de Wao Mochi

En esta línea, Helados Estiu acaba de anunciar la inversión de 20 millones de euros en Cheste para la creación de una nueva nave de fabricación que se completará en 2021 y que tendrá 70.000 metros cuadrados. Una de las explicaciones de este crecimiento radica en uno de sus productos-estrella: los mochi. Se trata de unos helados inspirados en los famosos postres japoneses, con una cobertura de masa de arroz y relleno de helado cremoso de coco y de sorbete de mango. Un hito importante de la empresa fue cuando el año pasado lanzaron una marca internacional propia, Wao Mochi, y que ya se comercializa en Holanda, Irlanda, Ucrania, Finlandia, Letonia, Alemania y Armenia. "Creemos que tenemos un producto de gran calidad y que el mochi es pequeño, divertido, fácil de consumir, tanto en invierno como en verano, y dirigido a un público capaz de apreciarlo", sostiene la directora general, y añade: "Sí, pensamos que tenemos margen en el mercado europeo y capacidad competitiva. La innovación es una oportunidad".
 

Mochi de mango i coco | Cedida
Mochi de mango y coco | Cedida

Con todo, ¿como afectará la crisis del Covid-19 a Helados Estiu? "Nosotros, como parte de la cadena alimentaria, hemos sido considerados esenciales y no hemos dejado de trabajar. Al principio la dificultad fue gestionar el miedo, lógico. Implementamos medidas internas necesarias para garantizar la seguridad de las personas y la producción en las condiciones de seguridad y calidad requeridas. Gran parte del trabajo ya estaba hecho porque funcionamos con estas medidas de manera habitual", explica María José Félix, y sostiene que "a pesar de la gran incertidumbre, hay que continuar avanzando". Optimismo, trabajo e innovación en una empresa que a buen seguro que continuará alegrándonos los veranos... y también el resto del año.

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