El Gobierno español aprobará este martes la licitación de las obras para la superestructura de la nueva doble vía entre la línea Barcelona-Tarragona de ancho convencional y las terminales 1 y 2 Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, además de sus respectivas estaciones de metro de la L9, según ha podido saber la ACN. Se trata de la fase 2 de los trabajos del nuevo acceso ferroviario a las instalaciones aeroportuarias, donde actualmente sólo se puede llegar hasta la terminal 2 desde la Estación de Sants. La actuación, con un plazo de ejecución de 24 meses, tiene un coste aproximado de 74 millones de euros. La anterior fase consistió en la perforación del túnel de unos tres kilómetros del tramo principal hacia la T1.
El contrato incluye –entre otros- la conexión con la línea Barcelona-Tarragona, la adaptación de las vías de acceso y los movimientos de tierra para hacer el enlace, además del sistema de electrificación y de las instalaciones de seguridad y comunicaciones del nuevo ramal. A parte, también cuenta con los trabajos de arquitectura a los andenes y de las estructuras de las estaciones de las dos terminales e instalaciones como el agua, la electricidad, la ventilación o la climatización.
Fuentes del Gobierno destacan que con la construcción de la superestructura se dará un "impulso definitivo" para la puesta en marcha del nuevo servicio, que podrían utilizar unos 9 millones de personas.
El tiempo estimado de viaje entre la Estación de Sants y la nueva parada a la T1 será de 19 minutos. El nuevo trazado empezará a la línea Barcelona-Vilanova de ancho convencional y llegará hasta la Terminal 1 haciendo una parada a la T2. Tendrá una longitud de 4,5 kilómetros, de los cuales 3.400 metros transcurren por un túnel. La gran mayoría de este trazado subterráneo, tres kilómetros, son de nueva creación después de que la tuneladora finalizara los trabajos a finales de 2018.
Una vez el nuevo tren entre en funcionamiento hasta la T1, los viajeros podrán llegar desde Manresa con la R4 o Maçanet con la R2 vía Barcelona y viceversa, los pasajeros que lleguen al Prat podrán enlazar con el resto de transporte público de la capital catalana y con el AVE hacia Madrid o Francia.