La Federación de Cooperativas Agrarias de Catalunya (FCAC) alerta de que la campaña de aceite de oliva 2022-2023 bajará hasta las 15.000 toneladas, un 52% menos respecto a una campaña media. Se trata de una cifra inferior a la previsión de 19.000 toneladas que se lanzaron en septiembre, antes de iniciar la cosecha, y la de 16.000 toneladas de finales de enero, cuando la cosecha se encontraba ya en la recta final. La producción media de aceite en Catalunya es de 31.000 toneladas. Esto sitúa a la actual campaña como la producción más baja de los últimos 15 años, seguida de lejos por la cosecha de 2018, cuando se obtuvieron 20.600 toneladas.
La Comisión del Aceite de Oliva de la FCAC se reúne este miércoles con responsables de la consejería de Acción Climática de la Generalitat para reclamar "medidas urgentes". Según la FCAC, el bajón de producción supondrá una pérdida de 55 millones de euros en el sector.
Antoni Galceran, responsable de aceite de oliva de la FCAC: "La facturación cae mientras los costes se han multiplicado casi por cuatro en el último año"
El responsable de aceite de oliva de la FCAC, Antoni Galceran, subraya que "esta situación conlleva grandes dificultades a las cooperativas dado que a la falta de producción se une al incremento de los costes y las consecuencias de la guerra en Ucrania. Advierte que el sector tendrá "dificultades para mantener los compromisos comerciales por la falta de producto. La facturación cae mientras los costes se han multiplicado casi por cuatro en el último año".
Las cooperativas elaboradoras de aceite concentran la mayor parte del coste energético en los meses de entrega de la aceituna, que va de octubre a finales de enero. Con una cosecha muy escasa como la de este año, el incremento de los gastos energéticos y de elaboración han repercutido sobre una menor producción y, por tanto, el coste por kilo de aceite producido se ha incrementado notablemente.
Ante esta situación, entre las medidas urgentes que la FCAC reclama al Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat se encuentra el establecimiento de una línea ayudas destinadas a cubrir parte de los gastos fijos de las cooperativas de las zonas afectadas por la caída de producción de aceite de oliva.
La FCAC reúne a un centenar de cooperativas oleícolas que elaboran el 73% del aceite de oliva catalán.