Foment del Treball reclama un "combate ideológico" contra las posiciones políticas decrecentistas. El presidente de la patronal, Josep Sánchez Llibre, que identifica estas tendencias con el programa del Ayuntamiento de Barcelona, promete durante su intervención a la Asamblea General presentar batalla contra las reclamaciones de "menos coches, menos turismos, menos hoteles, no al Hermitage y no a la ampliación del Aeropuerto".
A pesar de que el presidente reconoce que "todos queremos ciudades más pacíficas y agradables", los empresarios piden un consenso ancho para implementar los cambios necesarios. Fomento considera que actuaciones cómo las superilles o la modificación de la Vía Laietana "provocan pérdidas significativas en el sector comercial" por el modelo de movilidad que favorecen.
Más allá de la política municipal, los empresarios catalanes piden una "reformulación" de la transición energética del país que priorice la reindustrialización. Como ya apuntó la patronal a su última Industrial Session, la transición energética del país tiene que ser "justa, competitiva y eficiente" para apoyar a las posibilidades industriales del país. El tejido de negocio reclama además una "estrategia conjunta de los agentes sociales y económicos y las administraciones públicas de Catalunya" para aprovechar las posibilidades que ofrecen los fondos Next Generation EU.
Para profundizar el potencial económico de la ciudad, Fomento pide "consolidar el ecosistema de startups a través de Tech Barcelona". En este sentido, Sánchez Libro reclama "hacer de Barcelona una de las mejores ciudades del mundo" cómo ha afirmado recientemente el medio The Telegraph "Tenemos que potenciar y reforzar el ecosistema startups, motor de talento, de capital y de futuras empresas tractores", defiende el empresario. Las medidas que reclama la entidad servirían para "reforzar la cohesión social". Según concluye Sánchez Libro, "La concertación social, necesaria para evitar conflictos, tiene que ir presidida por la prudencia".