Foment del Treball considera que el Gobierno español tendría que rechazar la propuesta europea de reducción del consumo de gas. En una misiva enviada a las ministras de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y de Industria, Reyes Maroto, la patronal se niega a "aceptar una imposición" desde los países norteños después de los costes asumidos por los consumidores de gas españoles para garantizar su suministro desde fuentes diversas.
La presidenta de la Comisión de Energía de la asociación empresarial, Virginia Guinda, autora de la carta, ha comunicado a las ministras su "preocupación" por las medidas que quieren imponer los países norteños de Europa. Para solucionar esta crisis energética, la empresaria propone aumentar las ayudas a las industrias consumidoras de gas hasta los dos millones de euros que permite la Comisión Europea.
Desde Fomento añaden la reclamación de un "cambio regulador que permita a la industria estar en el mecanismo de compensación de la excepción ibérica" porque las ayudas cubran el coste real del gas; así como mantener la flexibilización de los contratos de suministro de gas natural o rebajar los peajes de gas. Las demandas de la patronal se entienden a cuestiones fiscales y financieras de apoyo al tejido empresarial, desde la reducción del IVA del gas natural hasta la flexibilización del pago de los créditos ICO o el pago de emisiones de CO2.
En el contexto de crisis energética imperante, Fomento cree necesario "mantener la actividad productiva de una manera competitiva"; algo que no se puede lograr con las reducciones de consumo que plantea Brussel·les de acuerdo con las reclamaciones de los países más dependientes del gas ruso. Según concluye la patronal, "No se puede aceptar ahora una imposición a la reducción de gas a aquellos países que han hecho un esfuerzo para garantizar el suministro con un coste en su competitividad".