El Consejo de Ministros ha aprobado la actualización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) para el período 2023-2030. La iniciativa busca mejorar la autonomía estratégica del Estado en un momento marcado por crecientes tensiones geopolíticas que, en los últimos años, han disparado el precio de la electricidad, los combustibles y los alimentos.
Para resolverlo, se prevé alcanzar una reducción de la dependencia energética del 73% en 2019 hasta el 50% en 2030, lo que supondría un ahorro en importaciones de 86.750 millones de euros.
Se prevé alcanzar una reducción de la dependencia energética del 73% en 2019 hasta el 50% en 2030
También se eleva el objetivo de reducción de gases de efecto invernadero, que se sitúa en un 32%, frente al 23% estimado en la versión original del plan enviado a Bruselas.