Los precios en Catalunya vuelven a crecer después de diez meses consecutivos en deflación, una tendencia que empezó en marzo, coincidiendo con la declaración del estado de alarma para frenar la expansión de la covid-19. Según los datos presentados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Índice de Precios al Consumo (IPC) en Catalunya durante el mes de enero se ha incrementado un 0,4% en términos interanuales, casi un punto por sobre la evolución registrada el diciembre (-0,6%).
El incremento se debe de al encarecimiento de los suministros –sobre todo la electricidad- (+2,5%) y de los alimentos y bebidas no alcohólicas (+2,1%), mientras que los que más han disminuido, con diferencia, son el vestido y el calzado (-15,4%), además del ocio y la cultura (-0,5%) y el menaje (-0,1%).
En el conjunto de España, la inflación se mantuvo plana en relación con el mes de diciembre y la tasa de variación anual se situó un punto porcentual por sobre, hasta el 0,5%.
Catalunya es la cuarta comunidad con la tasa interanual más baja, junto con Galicia, Murcia, Asturias, Castilla y León y Madrid (+0,4%), todas por ante las Canarias y Castilla-La Mancha (+0,2%), y La Rioja (+0,3%).