A la espera de su debate el mes de febrero, el Gobierno catalán presentó ayer su propuesta para los presupuestos de 2015. El consejero de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Colell, presentó unos números que prevén volver a aumentar el gasto. Los ingresos que prevé el Gobierno (19.981 millones de euros) no llegan a cubrir los gastos (22.481 millones de gasto, de los cuales 21.597 se reparten entre los diferentes departamentos del Gobierno). Esta última cifra ha aumentado un 6,4% respeto el año anterior. En cuanto al sesgo entre gastos e ingresos, se pretende cubrir con la reclamación en el Estado de más de 2.500 millones de euros.
Mas-Colell, que ha sido entrevistado a Raigo1, ha querido remarcar que "no podemos recortar más, porque los catalanes no se lo merecen". Por eso, el consejero afirma que con estos presupuestos "no vamos a pedir caridad, pedimos que nos llegue una parte más alta de los impuestos que pagan los catalanes".
Concretamente, el titular del departamento de Economía y Conocimiento fía 2.138 millones de euros a la negociación política; además de 317 millones de euros de ingresos extraordinarios fruto de privatizaciones y ventas de activos.
Expansión con menos dinero
Mas-Colell prevé un escenario de crecimiento por el 2015 del 2,2%. "Pero no sabemos si lo podremos mantener, no somos un país normal porque no tenemos control de los ingresos que tenemos y los aumentos de los impuestos no se reflejan en nuevas partidas presupuestarias", ha lamentado.
El consejero ha remarcado que, en contraste, el Estado "al BOE cada semana está haciendo ampliaciones de crédito basadas en que los ingresos son mejores del que se pensaban". "Esto si, incluyen una partida de cuatro millones por el Liceo", ha bromeado.
El 2015 será de expansión pero "recibiremos menos dinero que el 2013", que fue un año de contracción. Por este motivo, dice Mas-Colell, "tenemos que gastar el que corresponde. Nosotros no recibimos nada que no hayamos contribuido. Si este presupuesto se aprueba, no será un brindis al solo: se devolverán las pagas dobles, se pagarán a los interinos, se acabará el sector del aeropuerto de la L9, etc.".
Concretamente, se destinarán 607 millones de euros por la paga extra de los 210.000 empleados públicos, que ha sido suspendida durante tres años; y para dejar sin efecto la reducción de jornada y sueldo por más de 6.500 trabajadores interinos.
Como hacer unos presupuestos?
Según Mas-Colell hay dos maneras de hacer unos presupuestos de la Generalitat. La primera es "mirar qué tienes, cuadrar los presupuestos y ajustarte haciendo recortes – entonces sacas buena nota como contable presupuestario".
La segunda manera de hacer un presupuesto es estimar el que "razonablemente" se necesita y ver "si con el dinero disponible tienes bastante, y, sino, espabilarte para conseguirlos". Esta segunda opción es la empleada este año con las reclamaciones de "deudas históricas del Estado con Cataluña", como por ejemplo la disposición adicional tercera del Estatuto correspondiente al 2008, de la cual se reclaman 759 millones de euros. Otra de las reclamaciones principales son 635 millones de compensación por el impuesto sobre los depósitos bancarios que el Estado no permitió aplicar a la Generalitat.
Estas partidas suman un total de 2.500 millones de euros que, según el consejero, "nos corresponden˝. Por eso Mas-Colell confía en "la capacidad política de los catalanes al poner sus exigencias encima de la mesa para recibir estos recursos.
Para conseguir estos recursos, el consejero enmienda tres vías posibles: la primera es "recibirlas como recursos presupuestarios", cosa que sería "ideal". La segunda manera es con empréstitos con un cambio de la política –totalmente sesgada- del déficit.
En este sentido Mas-Colell ha denunciado que a las comunidades autónomas sólo se los adjudica un 0,7% del techo de déficit . "Esto se tendría que reequilibrar. Durante la época socialista la deuda para las Comunidades Autónomas era de un tercio del total, pero con el nuevo gobierno esto cambió", lamenta el consejero. De hecho, el tope deseado por Mas-Colell, del 1,62 o el 1,5%, casi duplica el fijado por el Estado.
La tercera manera es "más exótica". Por el consejero, puede ser que "el Ministerio trabaje con un objetivo de déficit a la sombra, o sea, que provean liquidez como si el déficit fuera otro". Para Mas-Colell, esta tercera opción es "permanentemente humillando porque te sientes que no cumples un déficit – que es imposible cumplir. Pero este es lo preferido por el Ministerio".
Un año electoral
Mas-Colell dice que propondría estos presupuestos aunque el próximo año no se abriera un ciclo electoral importante en el Estado. El consejero cree que la propuesta de ERC de hacer una prórroga de presupuestos no se ajusta al carácter expansivo en que se encuentra la economía ahora mismo. "Una prórroga, cuando hay voluntad expansiva, es restrictiva".
El consejero también ha comentado el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), que considera "la otra cara inevitable del hecho que no tenemos hacienda propia". "No hay nada más allá de la cortesía para estar agradecido al FLA", ha lamentado.
España paga deuda con garantía catalana
Mas-Colell ha subrayado que en los últimos años el Estado ha ido a los mercados por 750.000 MÍO, un 20% de estos con garantías catalanas. "Si Cataluña no contribuyera en impuestos no podrían colocar este dinero", ha avisado.
Precisamente en el caso de la deuda, ha asegurado que "si nosotros tenemos uno, el Ministerio de Hacienda lo tiene mucho más elevado. "Con una hacienda propia, nuestro problema de deuda sería manejable".
Soportar un país nuevo
En cuanto a si la economía catalana podría ser autosuficiente en caso de independencia y se podría pagar el periodo de transición nacional, Mas-Colell cree que "globalmente, estamos en superávit. No tendría que haber problemas para pagar facturas o pensiones el día siguiente de la independencia".
En este sentido, hablando de estructuras de Estado, el consejero ha avisado que la Agencia Tributaria Catalana tiene que mejorar, "tenemos demasiado pocos inspectores de hacienda". Un primer paso para hacerlo es el aumento previsto en su asignación, que pasará a ser de 35,9 millones de euros, un 25% más que el actual.
Relaciones rotas con Madrid, mirada en Europa
"No hablo con Montoro desde septiembre, ha dicho Mas-Colell. "Las relaciones con el Ministerio, aún así, son constantes a nivel técnico - por necesidad e interés, dice-, pero las relaciones políticas están rotas", según el Consejero.
El que si que tiene claro Mas-Colell es que "el 2015 habrá un cierto crecimiento, el 2016 ya no estoy tan seguro". El consejero cree que haciendo la mirada larga "estamos en manso de Europa". Las expectativas de crecimiento son de casi el 2% en España y seguramente en Cataluña serán más altas. En general en España se ha hecho aquello que desde Bruselas se exigía "con creces". Por este motivo Mas-Colell cree que ahora "le toca en Europa hacer su parte. No tiene ni ninguno ni pies que Alemania haga unos presupuestos sin inversiones. Necesitamos una Alemania más expansiva y avezada al crecimiento".
Aun así, el pesimismo de Mas-Colell se hace patente por la poca confianza que tiene en las políticas de Merkel: "necesitamos que el BCE se decante por el talante de Draghi , pero no está claro, porque la visión moralista de Alemania domina y podrá hacer daño".