El Govern cifra en "al menos 10 millones de euros" el impacto en la industria turística catalana por la quiebra del operador turístico británico Thomas Cook, que mantenía acuerdos con decenas de hoteles y empresas turísticas a la Costa Brava y Costa Dorada. "La última liquidación que Thomas Cook hizo en Catalunya es de finales de julio, todo el mes de agosto y septiembre no han sido liquidados", ha alertado la consellera d'Empresa i Coneixement, Àngels Chacón, en declaraciones a la ANC.
Las estimaciones del Govern son iniciales y no se descarta que la cifra final pueda ser superior. Por otro lado, la Generalitat calcula que hay 5.000 turistas que tenían que volar con un avión de Thomas Cook desde Reos y Girona. Chacón ha asegurado que "se tienen que preocupar relativamente" por la relocalización de estos viajeros porque la mayoría de estos vuelos ya se han reprogramado en otras compañías.
La titular de Empresa ha asegurado que el Govern se ha preocupado por "dos aspectos", desde que han sabido la noticia. El primero eran los turistas que tenían que volver a casa con vuelos operados por Thomas Cook, una compañía que trae unas 80.000 personas en Catalunya cada año. A lo largo de la mañana han comprobado que los 5.000 viajeros afectados provienen principalmente del Reino Unido, Holanda y Bélgica y ya disponen de vuelos "reprogramados" a través otras compañías. "Haremos un seguimiento pero nos tenemos que preocupar relativamente", ha dicho Chacón.
Más allá del sol y playa
En cambio, se ha constatado que hay decenas de empresas catalanas que todavía esperan pagos por servicios que habían prestado a Thomas Cook durante agosto y el septiembre. "¿Qué pasará con estas empresas que tenían que cobrar?", se ha preguntado Chacón, que ha hablado con el consulado inglés, ConfeCat, ACAVe o representantes del sector turístico de Salou, Vilaseca o Cambrils para analizar la situación.
La titular de Empresa ha explicado que asistirá a la reunión que el Gobierno español ha convocado para abordar las consecuencias que el cierre tendrá sobre la industria turística en el Estado, sobre todo con otros territorios afectados como las Islas Baleares y las Canarias. "Más allá del traslado de los turistas, nos preocupa mucho qué impacto tiene para nuestro tejido empresarial, por la restauración y el turismo", ha declarado la consellera.
Chacón ha aprovechado el incidente con Thomas Cook para asegurar que el sector del turismo en Catalunya tiene que mirar hacia otros mercados como el americano o el asiático y alejarse de la modalidad del turismo de "sol y playa". De este modo, se conseguiría desconcentrar y desestacionalitzar la oferta y aumentar el gasto de los turistas que visitan Catalunya, ha defendido.