Los jóvenes ya no quieren un coche. La tradicional situación de encontrar trabajo y ahorrar para comprarse el primer vehículo ha pasado a la historia. Si pagamos una suscripción mensual para ver Netflix o escuchar música a Spotify, por qué no para disfrutar de un coche sin tenerlo en propiedad? Las nuevas opciones de movilidad, los millennials y la tecnología forman un nuevo camino con mucho recorrido para startups como Swipcar.
Los fundadores de Swipcar se definen como los brokers del renting de coches. Su modelo de negocio permite alquilar un vehículo en sólo cinco minutos y totalmente online. "Hemos visto como el sector de la automoción y el consumo está cambiando hacia un tipo de suscripción y no tanto hacia la compra de un coche", señala el fundador y CEO de Swipcar, Julio Ribes. De hecho, hasta agosto de este año se han matriculado en España un total de 210.074 coches de renting, un 7% más que durante el mismo periodo de 2018.
Ribes: "Ya hay un cliente preparado para comprar un coche online"
La startup funciona como intermediaria entre las entidades financieras que tienen coches de renting y el consumidor final que quiere adquirir uno. Así, en una sola plataforma, Swipcar aglutina las ofertas de renting disponibles en el mercado y gestionan la firma del contrato totalmente online. "Tenemos un software que determina el riesgo de la operación, analiza la situación financiera del usuario final y si es buena, te aprueba el renting y te envía el contrato digitalmente", explica Ribes. "En menos de 5 minutos puedes tener el coche contratado", añade. Una vez hecho el contrato, el cliente sólo tiene que esperar entre 15 y 21 días por los coches que están en stock y lo recibirá en el concesionario más cercano o en su casa.
Dicho y hecho. Tener un coche nunca había sido tan fácil y rápido. Ahora bien, como todo lo que se adquiere online, se hace sin ver el producto personalmente. "Siempre habrá clientes que querrán ir a un concesionario a ver y probar el coche, pero también sabemos que hay muchos que no les hace falta", señala el emprendedor. Ribes, que ha trabajado durante muchos años en el sector de la automoción en compañías como Seat o Ford, explica como había oído decir a varias personas que sólo necesitaban que el coche no los dejara tirados. "Lo más importante para muchos usuarios es que el coche funcione, no necesitan ir a un concesionario ni ver el vehículo. Ya hay un cliente preparado para comprar un coche online", señala. Así, se dirigen al consumidor que normalmente no tiene tiempo y con Swipcar puede consultar todas las ofertas disponibles online y tener una experiencia más digitalizada.
Un crecimiento a toda velocidad
La idea de Swipcar nace durante el verano del 2017, cuando los tres socios de la empresa, Julio Ribes, Pablo Pascual y Blas Gil, se conocieron en el programa de incubación de Demium Startups y empezaron a pensar en por qué en el mundo de los coches la experiencia todavía no era digital.
Un año y nueve meses después de fundar la empresa, en enero del 2018, ya son 23 personas en el equipo y con un crecimiento mensual del 30-40%. "Ha sido un crecimiento bastante rápido porque el sector va muy deprisa y porque estamos en un momento también de crecimiento del sector del renting", explica Ribes.
La plataforma de Swipcar con todas las ofertas de renting de coches | Cedida
El renting de vehículos normalmente tiene un periodo que va de los dos a los cinco años, a pesar de que Swipcar actualmente intermedia contratos que van entre los 24 y 36 meses. "Estamos trabajando en acortar este tiempo y también poder hacer renting de coches de segunda mano, pero todavía son dos líneas de negocio que estamos desarrollando", detalla Ribes.
La startup cobra una comisión por entrega de vehículo, que se lleva del contrato de renting de la entidad financiera. Swipcar, el 2018 ha facturado 60.000 euros y espera llegar en medio millón este año, ya opera a todo el Estado español, Portugal y Francia. La empresa, incubada desde hace unos meses en Barcelona Activa, ha obtenido un Enisa y ha levantado una primera ronda de 50.000 euros y hace dos meses una segunda de medio millón de euros.
