El último día de Antoni Abad en Cecot: "Gobernar es gestionar bien"

Antoni Abad deja la presidencia de Cecot reivindicando la libertad y el riesgo inteligente y con un claro aviso a la administración: "¿Cómo cuidamos a las empresas del país?"

El último día de Antoni Abad como presidente de Cecot. | Carolina Santos El último día de Antoni Abad como presidente de Cecot. | Carolina Santos

Tal como avanzó VIA Empresa, Xavier Panès ha relevado este miércoles a Antoni Abad en la presidencia de Cecot tras diecisiete años liderando la patronal catalana. Hasta aquí, ninguna sorpresa de última hora. En una conversación con este medio durante su último día como presidente, Abad reclama una reforma de las administraciones públicas y que se pongan las pilas para facilitar que las empresas sean competitivas y, así, conseguir que el país también lo sea. También reivindica la libertad, la rebeldía positiva, la contribución y el riesgo inteligente, a la vez que advierte de las consecuencias negativas de la lentitud y el inmovilismo en la tramitación de proyectos empresariales.

Estas son sus reflexiones sobre la política, la economía y la sociedad actual, así como el relevo y la visión en Cecot. Este es su legado.

El nuevo presidente

Las elecciones son "un trámite" en Cecot porque, desde que se constituyó en 1978, nunca se ha presentado más de un candidato a la presidencia. Como sus cuatro antecesores –Narcís Bacardit, Pere Guitart, Eusebi Cima y Antoni Abad-, Panès no ha tenido rival. No obstante, Abad rechaza que hayan encarado el relevo con mentalidad conservadora: "Cómo podemos ser conservadores si lo único que se mantiene es el cambio. En Cecot nos gusta el riesgo, pero un riesgo inteligente. Defendemos nuestras ideas. Y este talante queda asegurado con Xavi Panès". Admite, sin embargo, que en este tipo de entidades empresariales "tampoco es lo más esperable" que se vaya a unas elecciones con varios candidatos.

"En Cecot nos gusta el riesgo, pero un riesgo inteligente. Defendemos nuestras ideas. Y este talante queda asegurado con Xavi Panès"

La decisión

Abad explica que lo decidió "hace tiempo", pero que ha esperado a la consolidación del nuevo secretario general, Oriol Alba, que en enero de 2021 relevó a David Garrofé después de 34 años en este cargo. "Pronto se cumplirá un año y medio que de la llegada de Oriol Alba. Está consolidado. Ha trabajado un plan estratégico que se debatió y aprobó. Por lo tanto, lo que toca ahora es el relevo en la presidencia. Pero me lo estoy pasando tan bien que me tuve que hacer la pregunta otra vez. Y me dije: ¿Quedamos que cuando se consolidara el secretario general y tuviéramos la hoja de ruta, lo harías?, pues, lo he hecho". Dicho y hecho.

Antoni Abad

Fotografía de Carolina Santos

 

El inmovilismo de la administración

"Las administraciones no gestionan en el tiempo debido y, a veces, quedan bloqueadas. Esto es un problema. Hablo de las administraciones españolas y de las catalanas. A nosotros nos gusta ser atrevidos. Pero, en este país, ante tanto inmovilismo, si haces propuestas ya te ponen el sello de atrevido. Y si eres atrevido en una propuesta, ya parecería que eres valiente. No, no, no, nosotros no lo vivimos así. Formular propuestas atrevidas es nuestra obligación. Cuando hemos repetido tantas veces que España no es homologable en términos internacionales ha molestado en muchos ámbitos".

"Cuándo hemos repetido tantas veces que España no es homologable en términos internacionales ha molestado en muchos ámbitos"

La reforma: gestionar bien

Abad reclama una reforma de "las estructuras de las administraciones públicas porque no tienen el concepto de competitividad-país: no son nada conscientes del valor competitivo del tiempo. Pueden pasar dos, tres o cuatro años para sacar adelante un proyecto empresarial. Esto es inadmisible. Y, además, no pagan las consecuencias. La reforma de las administraciones es absolutamente necesaria. Esto no va de gestión pública contra gestión privada: no, no, esto va de buena gestión. Gobernar es gestionar bien. O entendemos que si no somos productivos, que si no somos competitivos, no sabremos cómo llenar la bolsa para la sociedad del bienestar. Debemos hablar de una vez sobre cómo priorizamos, pero no tenemos interlocutor. Nos hemos dirigido a todo el mundo, incluso a la señora Ursula von der Leyen [actual presidenta de la Comisión Europea]".

Antoni Abad

Fotografía de Carolina Santos

El trabajador y la renta

Según el hasta ahora presidente de Cecot, "tenemos un Estatuto de los Trabajadores que es una pieza paternalista que viene de donde viene. En parte, predemocrático. Los ámbitos de la regulación laboral en Europa han cambiado mucho, han evolucionado, y aquí casi estamos en confrontación. Lo que debemos cuidar y defender es la empresa, el trabajo. Se debería derogar el Estatuto de los Trabajadores y gestar el Código del Trabajo porque es en base al trabajo que debemos construir un nuevo marco".

"La política en este país defiende poco la libertad... Nos conviene un ciudadano que se plantee la relación entre el Estado y uno mismo. La libertad es conciencia, duda, decisión,... y esto se alimenta muy poco"

La patronal vallesana estudió en profundidad el campo de la renta básica universal con la colaboración de diferentes expertos. "Sobre la renta básica universal nos conviene un perfil de ciudadano que tenga más autonomía, mas criterio propio, más independencia y, por lo tanto, que sea menos manipulable, menos influenciable. Yo me pregunto: ¿quién defiende la libertad? La política en este país defiende poco la libertad (...) Si vamos a buscar este perfil de persona, que crece personalmente, que madura, la renta básica universal posee atributos muy buenos. Nos hace falta un ciudadano que se plantee la relación entre el Estado y uno mismo. (...) Para mí, renta básica universal significa una cierta revolución cultural porque te permite una red que da seguridad para tomar, con más libertad, tus decisiones personales. La libertad es conciencia, duda, decisión,... y esto se alimenta muy poco. Esta red nos va bien porque nos permite arriesgar más".

El riesgo inteligente

"Predico una frase, sobre todo cuando hablo con gente joven: pon más riesgo en tu vida, riesgo inteligente o te arrepentirás. Existen estudios sobre personas que están al final de la vida, a punto de morir. Cuando se los pregunta que habrían cambiado en sus vidas, en primera posición están los que dicen que se equivocaron porque tendrían que haber arriesgado. Colectivamente, como sociedad, nos interesan las personas que arriesguen más. No quiero decir solo emprendedores en los negocios porque se puede ser emprendedor en el ámbito social o en el que sea". Abad ha sido y es un firme defensor del riesgo inteligente.

 
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Fotografía de Carolina Santos

Sobre la emancipación, un ejemplo muy reciente: "La ayuda de 250 euros para que los jóvenes paguen el alquiler es una medida equivocada porque se aplica sobre un colectivo que trabaja y que obtiene recursos recurrentes mensualmente. El mensaje potente es decir a los jóvenes de más de 18 años: vuestra emancipación, la de verdad, lo conseguiréis si estudiáis y aprobáis. Por lo tanto, los 250 euros deberían destinarse a los que estudian, tanto si trabajan o no, que no tengan una renta recurrente. Tienes que poner este incentivo, si estudias y apruebas. La emancipación de verdad es crecer como persona: estudiar, aprobar y, si es así, los 250 euros".

El paro y el bienestar

"En 2022, decir que en Catalunya no hay paro es una realidad, lo que hay son muchos parados. Las necesidades de todos los sectores para cubrir puestos de trabajo es muy grande". A la pregunta de por qué cuesta tanto encontrar trabajadores, responde que "existen muchas causas, pero hay una que empieza a asomar: el incentivo marginal de ir a trabajar en relación al concepto 'lo que tengo como estado del bienestar' no estimula", asegura Abad.

"Decir que en Catalunya no hay paro es una realidad, lo que hay son muchos parados"

Y añade: "En Cecot no hablamos nunca de estado del bienestar sino de sociedad del bienestar porque somos conscientes que la bolsa del bienestar la generamos todos con nuestro esfuerzo. Por lo tanto, el Estado no nos da, lo Estado nos devuelve. Y si estamos en la sociedad del bienestar, debemos hacer un esfuerzo de priorización y de estímulos inteligentes por primar lo que más conviene. ¿Y que nos conviene?, pues, que muchos más jóvenes vayan hacia cualquier tipo de estudios. ¡Capacitaos!".

Tributario vs. contribuidor

Un cambio de paradigma y de mentalidad: "Ser tributario equivale a súbdito que paga tributos y, por lo tanto, el rey y, en este caso, el político, decide. Ser contribuidor significa que somos nosotros los que contribuimos y, como vivimos en sociedad, sabemos que tenemos la obligación de contribuir. A partir de aquí, nosotros nos hemos de sentar en la mesa donde se deciden las prioridades sociales para evaluarlas desde diferentes ópticas. No es una cuestión ideológica sino humanista".

"Ser tributario equivale a súbdito que paga tributos y, por lo tanto, el rey y, en este caso, el político, decide. Ser contribuidor significa que somos nosotros los que contribuimos y tenemos esta obligación de contribuir. No es una cuestión ideológica sino humanista"

La economía sumergida

Deberes pendientes: "Si en España la dimensión de la economía no declarada es tan grande, ¿alguien ha tomado medidas correctoras? En Portugal las tomaron hace años y lo han reducido. Debemos traducirlo en acciones operativas. En Cecot pensamos que esto no puede seguir de este modo porque todos pagamos mucho y recaudamos relativamente poco comparados con otros países. Esta discriminación a la inversa no es socialmente justa".

Antoni Abad

Fotografía de Carolina Santos

La toma de decisiones

Abad reclama a los políticos que tengan en cuenta la opinión de las empresas en el momento de legislar o aplicar las medidas. "Los políticos llevan unas inercias desde la transición. Toman decisiones y después vienen las empresas a quejarse: esto queda corto, esto es imposible, ¡ay!, ¡ay!... Esto no pasa en otros países. Tenemos que encontrarnos en el proceso de toma de decisiones. Nadie tiene un criterio de 360 grados. (...) En este proceso debe estar la administración, las empresas "me gusta decir que soy un presidente de empresas– y, según el tema, buscaremos unos expertos. Las decisiones serán mejores si nos reunimos en el momento de tomarlas. En este país se opina de todo y lo que falta es rigor". Más rigor y menos opinática.

"En este país se opina de todo y lo que falta es rigor"

Partido a partido

"Añoramos la legislación de otros países en los que hay unos parlamentos que tienen una representación mixta entre los que proceden de partidos y los que vienen de territorios. Necesitamos representantes políticos próximos con los cuales puedas ir a despachar, que dependan de tu entorno territorial y no de la dirección de un partido. La legislación electoral en Catalunya se debería haber cambiado hace décadas. Esto también es inmovilismo. También pasa en el Estado. Existe la idea de que la política ya proveerá: no, no, en los países que funcionan bien, la política no está por encima de la empresa sino al mismo nivel". 

"Necesitamos representantes políticos próximos con los que puedas ir a despachar, que dependan de tu entorno territorial y no de la dirección de un partido. En los países que funcionan bien, la política no está por encima de la empresa sino al mismo nivel"

La economía catalana

Se han formulado relatos de todo tipo alrededor de la economía catalana, pero Abad tiene muy claro de donde venimos y a que podemos aspirar. "Debemos reaccionar. Ocupamos una posición de relevancia mundial que hoy no tenemos, pero, si la habíamos tenido la podríamos recuperar. Reparto la responsabilidad a todos. Nosotros también tenemos nuestra parte de responsabilidad, pero no nos quedamos solo en este reconocimiento".

"Estuvimos en una posición de relevancia mundial que hoy no tenemos, pero, si la tuvimos, la podríamos recuperar"

El bloqueo de las inversiones

El hasta ahora presidente de Cecot incide en la lentitud de la administración en la tramitación de proyectos. A menudo, los empresarios locales tardan mucho más que las grandes multinacional para conseguir licencias o permisos por poner en marcha la actividad. Pone como ejemplo la fábrica del grupo surcoreano Iljin Materiales que se proyecta Mont-roig del Camp, con una inversión de 600 millones de euros para fabricar componentes de baterías. No se opone a las inversiones extranjeras, todo lo contrario, pero recuerda que en el Vallès (el Oriental y el Occidental) hay proyectos de empresas locales con una inversión conjunta de más de 600 millones de euros que todavía están esperando que se resuelvan las autorizaciones. "¿Cómo cuidamos a las empresas del país?", pregunta a los responsables de la Generalitat.

Antoni Abad
Fotografía de Carolina Santos

El legado y el recuerdo

De sus diecisiete años a la presidencia de Cecot, Abad destaca el momento en que decidieron, asumiendo el riesgo que suponía, ponerse al frente de la Fundació de l'Antiga Caixa de Terrassa, más conocida por LaFACT. Se siente especialmente orgulloso por la obra social que está desplegando. En el aspecto negativo, apunta que "el regreso de lo que hemos explicado, de las propuestas para hacer cambiar las cosas, es bajo", si bien insiste en que no se rinden: "no podemos ser maleducados, negativos o pesimistas, pero tampoco callar". Su legado habla por sí solo.

El futuro

¿Qué le depara el futuro? Antoni Abad continuará como presidente de la asociación Fem Vallès y no descarta asumir otras responsabilidades pese a indicar que, a partir de ahora, "bajará revoluciones". Aunque en los círculos empresariales vallesanos se le sitúe como próximo presidente de Mutua Terrassa, Abad prefiere tocar de pies en el suelo en su último día como presidente de Cecot y no hablar todavía sobre situaciones "futuribles".

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