"Europa está pagando la deslocalización electrónica de los años 90", lamenta el secretario general de Industria y Pequeña y Mediana Empresa del Gobierno Central, Raül Blanco. El Estado español, especialmente algunos de sus territorios, han seguido la tendencia continental de la gran dependencia en cuestiones estratégicas para la producción y para la adaptación de las nuevas necesidades industriales, empresariales y de consumo. En un momento de actualización del que quiere decir producir, alrededor de una "nueva revolución industrial" – como identifica el director general de Acció Joan Romero – Catalunya y muchos de los territorios de su entorno se encuentran en una situación de subordinación fabril, de materiales, energética, que, según se ha querido remarcar durante la primera jornada del congreso de la industria 4.0 Advanced Factories, se tiene que revertir.
El director del congreso, Albert Planas, es optimista en cuanto a la capacidad del continente de transformar su forma de producir. "Esta será la década de la robótica en Europa", ha declarado, alentando a un cambio de tendencia sobre la idea de competitividad industrial que se tiene en el Estado español. La innovación productiva, la automatización y la apuesta por las nuevas tecnologías tiene que ser, como comparte el presidente de Advanced Factories Salvador Giró, la carta de presentación de la industria española de cara a los mercados exteriores. "El tiempo de competir por los costes laborales más bajos se ha acabado", remarca Giró, que insiste en la "imperiosa necesidad" de relocalitzar aquellas industrias que se han marchado del territorio durante las últimas décadas para traerlas "más cerca de los consumidores". Tanto Blanco como el vicepresidente y Consejero de Empresa de Aragón – región industrial europea 2022 e invitada en el congreso – Arturo Aliaga se han sumado a este llamamiento a "la autonomía estratégica" de las industrias europeas y del Estado.
Planas: "Donde se fabrica, se genera conocimiento, nuevos puestos de trabajo más calificados, inversión en I+D. Este es el círculo virtuoso de la nueva industria"
Aliaga, de hecho, ha felicitado a un tejido industrial catalán que considera puntero en cuanto a su digitalización y transición tecnológica. "Barcelona ha recuperado el pulso industrial que nunca debió perder", celebra, apuntando los fuertes "vínculos económicos" que hacen de la colaboración entre Aragón y Catalunya una "potencia económica" que tracciona buena parte de la producción y las ventas exteriores del Estado. Desde Acció, Romero entoma la responsabilidad de mantener este estatus, con ayudas desde las administraciones del país para asistir en "la sensibilización sobre la digitalización y en implementar la tecnología" de la mano del tejido productivo. El director general traslada a las empresas, así, el deber de transformarse. "Están cambiando las cadenas de valor de sectores industriales", razona, y la aplicación de las nuevas tecnologías a la producción catalana deviene necesaria para navegar estos cambios.
Todo y la elevada presencia internacional y de grandes empresas al territorio catalán, especialmente en la capital, el esencial tejido de pequeñas y medianas empresas es la medida más fiel de la automatización a la industria del país. Como afirma el presidente de Advanced Factories, "las grandes empresas ya están más o menos automatizadas, es la pyme la que tenemos que automatizar para ser más competitivos". De la mano de la Asociación Española de Robótica y Automatización – que también preside Giró – el congreso está impulsando lo proyecto Robot Start Pyme, con la idea de introducir "el primer robot a todas las pequeñas y medianas empresas del país". En un sentido parecido, el director general de Acción reconoce que el proceso de automatización ha arreciado el plan de la Generalitat para incorporar la industria 4.0 al 90% de las empresas catalanas antes del 2030.
La automatización es también, de hecho, un plan de autonomía estrategia industrial. El mismo Giró considera que aumentar y optimizar la capacidad productiva del país mediante la introducción del 4.0 en su tejido empresarial es una tarea imprescindible en la reindustrialización del país. Esta edición de Advanced Factories, así, llega en un "momento decisivo" por Barcelona y Catalunya. El congreso es, con todo, "una oportunidad para la reactivación", considera la tercera teniente de alcaldía de Barcelona Laia Bonet. La apuesta por las industrias del futuro en Catalunya para producir lo que se necesita será el factor diferencial para el crecimiento económico y la resiliencia del territorio. "No podemos sustituir la dependencia energética del petróleo por la del níquel, el magnesio o el tungsteno", apunta Blanco. La reindustrialización 4.0 es un proyecto de autonomía productiva, sostenibilidad y redistribución clave para Catalunya. "Donde se fabrica, se genera conocimiento, nuevos puestos de trabajo más calificados, inversión en I+D. Este es el círculo virtuoso de la nueva industria", propone Planas.
La fábrica del futuro
Entre las tendencias productivas más relevantes de cara a los próximos años, como mínimo en cuanto a la aplicación a los procesos de fabricación, la additive manufacturing mediante impresión en 3D destaca como uno de los elementos clave de la actualización de las cadenas de valor. Tal como apunta la vicepresidenta y directora general de negocio de HP printing multi jet Guayente Sanmartín, la fabricación aditiva "puede ayudar a pensar un mundo más ilusionante". Los ejes clave de la industria 4.0 – la sostenibilidad, la resiliencia y la innovación – están presentes en un modelo fabril especialmente exitós en "poner el cliente en el centro" de la forma en que se produce.
"Los clientes no buscan sistemas, buscan una pieza", apunta Sanmartín. La fabricación aditiva permite ajustar los modelos exactamente a las necesidades del comprador, e incluso mejorar sus expectativas. Las impresoras 3D admiten diseños inimaginables en una cadena de montaje clásica, y esto abre la posibilidad de fabricar componentes más efectivos, con menos coste en cuanto a materiales, con "conceptos que hasta ahora no teníamos". "El additive manufacturing nos ayuda a crear industrias más resilients, sostenibles e innovadoras", concluye Sanmartín.
El Advanced Factories de 2022, de hecho, mujer buen cuenta de esta clara tendencia. Además de la gran presencia del proyecto de 3D printing de HP – que gira alrededor de las verticales de salud, movilidad, industria y bienes de consumo, con propuestas que van desde ganchos por brazos robóticos hasta violines eléctricos – la fabricación aditiva se encuentra en todos los lados del congreso. Buen ejemplo es la catalana Windforce, presente en el Dfactory del Consorci de la Zona Franca, con propuestas de additive manufacturing por vehículos. La apuesta del CZFB, donde también se ubica el nuevo lab de HP, también ha estado presente en unos salones del CCIB que han dejado espacio a que Sanmartín considera una herramienta "para un futuro mejor de cada industria".
Coches, drones y algoritmos
La potente industria del automóvil del país ha tenido su réplica a la Advanced Factories. Para esta vertical, los asistentes al salón han aportado soluciones 4.0 que van desde el 3D Printing hasta la visión artificial, pasando por la logística automatizada. El centro tecnológico Eurecat, de hecho, ha presentado un dron de reparto automático de componentes para el vehículo eléctrico, que optimiza los procesos de fabricación y la cadena de montaje para el sector. Más allá de la fabricación, además, la parte más llamativa de la industria del automóvil al congreso ha sido la presencia de empresas cómo Tesla, con su modelo Y, que ha ofrecido a los visitantes un driving maceta.
Giró: "Este año es el año de la salida, de dejar atrás todos estos problemas. Esta edición de Advanced Factories será un éxito"
Catalunya ha presentado en el congreso su potencial en el sector de la visión artificial. La barcelonesa Infaimon ha llevado al CCIB propuestas diversas, de entre las que destaca, por ejemplo, el sistema de visión automática de componentes, precisamente, automovilísticos cómo la puerta del coche, así como un proyecto de mantenimiento preventivo. También se ha podido visitar el stand de Bcn Vision, con propuestas de control de robótica por visión artificial, visión 2D y 3D y aplicaciones de esta tecnología a varias verticales. En el centro de todo, pero, y como confirma el mismo Giró, está la Inteligencia Artificial. "Los últimos años la IA ha acontecido el catalizador de la industria 4.0, porque se ha utilizado en todos los sectores, y esta será la tecnología por excelencia que veremos en el futuro".
La disrupción que propone la aplicación de estas tecnologías a la industria catalana y española ha sido muy atractiva. En un congreso cómo Advanced Factories con especial vocación regional, que pretende concentrar una gran representación industrial catalana y delEstado español, las cifras esperadas para 2022 sugieren un gran éxito. Mientras que a su edición de 2020, celebrada escasas semanas antes del confinamiento, la feria atrajo unos 17.000 visitantes, la de este año espera una afluencia de hasta 19.000 personas después de un pico de acreditaciones durante las últimas semanas. Con 351 expositores, la feria espera un impacto sobre la economía de la ciudad de unos 41 millones de euros. "Este año es el año de la salida, de dejar atrás todos estos problemas. Esta edición de Advanced Factories será un éxito", concluye Giró.