Cuando Manel Adell anunció, el mes de julio del 2012, que dejaba Desigual, la compañía aseguró que era para "emprender nuevos proyectos profesionales y personales". Un año después, Adell acaba de incorporarse al consejo de administración de Puig , la multinacional catalana de perfumes. Con su incorporación, el consejo de Puig pasa a estar integrado por diez personas: Marc y Manuel Puig, miembros de la familia fundadora y actuales responsables de la compañía, Marcial Campos, Yovanna Kampouri, Pedro Nueno, Yannis Petrides, Rafael Cerezo, Josep Oliu, Jordi Constans y Manel Adell.
Paralelamente, Adell también ha sido nombrado consejero de la multinacional danesa Tiger, cadena de tiendas especializada en distribución de productos low-coste, diseño escandinavo y fun shopping.
No obstante estos cambios, Adell no descarta poner en marcha o sumarse a alguno otro gran proyecto. "Me va la marcha"; declaró a La Vanguardia.
Un currículum lleno de marcas
El nuevo consejero de Puig es nacido en Barcelona en 1961. Antes de Desigual, trabajó a Agrolimen y Cadbury-Schweppes. Posteriormente fue director de expansión internacional de Bang & Olufsen y creó Starlab. Manel Adell entró a Desigual como consultor en 2002. A la compañía de ropa de Thomas Meyer fue consejero delegado y accionista con el 30%, porcentaje que ha vendido al fundador de la empresa. Seestuvo diez años, durante los cuales la marca pasó de 8 a 700 millones de euros en ventas y más de 300 tiendas en todo el mundo.
El año 2011, en un acto a Esade, explicó las medidas que la compañía había tomado para superar la crisis: "A pesar de la complicada situación que tenemos en España y que el consumo no tiene la misma alegría que antes, seguiremos adelante con nuestro proyecto. Por nosotros, un problema es sinónimo de oportunidad", explicó entonces, aportando también una receta para pasar la crisis: "vendiendo más y gastando menos".