"Estamos en el camino de la recuperación", afirma Damià Calvet, que ocupa por primera vez en sociedad la silla de presidente del Port de Barcelona. Su nombramiento en sustitución de la que fuera su jefa política en la alcaldía de Sant Cugat del Vallès, Mercé Conesa, lo coloca al frente de la que describe como "la principal infraestructura económica del país" en un momento crítico: el regreso a la actividad frenada por la pandemia, las negociaciones del proyecto del Hermitage o las nuevas ayudas a sus colaboradores, cuestiones que marcarán el futuro del organismo, están sobre la mesa. "Y se trata de una recuperación rápida", defiende un Calvet optimista.
El Port de Barcelona ha presentado unos resultados que dibujan una V en su histórico reciente. A pesar de que todavía no logra los niveles de tráfico total previos a la pandemia – durante los primeros seis meses de 2021 se han movido unos 32,7 millones de toneladas de mercancías, todavía por debajo de los 34 que pasaron en el mismo periodo de 2019 – la recuperación respecto del primer semestre de 2020 es innegable: el Port ha visto pasar siete millones de toneladas más de mercancías la primera mitad de este año que durante los meses del confinamiento. Algunas de las mercancías clave, observa Calvet, todavía no han conseguido recuperarse de los efectos de las restricciones. "Hay algunos tráficos que siguen por debajo de los niveles previos a la Covid-19 – afirma el presidente – como son los pasajeros, los vehículos o los líquidos a granel".
Calvet: "Estamos en el camino de la recuperación, y se trata de una recuperación rápida"
El pasaje sigue siendo, de hecho, el tipo de tráfico más afectado por la crisis. La actividad crucerística apenas se ha reactivado, y solo se ha logrado el 1,4 % del movimieento normal previo a la pandemia. A pesar de que los ferrys sí que ven una ligera recuperación – 238.054 pasajeros, un 4% más que durante el primer semestre del 2020 – no es suficiente para hablar de regreso de los pasajeros. Las previsiones, sin embargo, revelan un cambio de tendencia: según Calvet, el Port espera recibir entre 75 y 100 escalas con 200.000 cruceristas durante el segundo semestre del año. "Son todavía datos estimativos", puntualiza el presidente.
En cuanto al movimiento de contenedores de 20 pies (TEU), unidad básica del transporte de mercancías, el dato es todavía más positiva. Los 1,8 millones de contenedores transportados por las instalaciones del Port superan la máxima histórica lograda el primer semestre de 2019, que se quedó en 1,7 millones de TUYO. El comercio exterior ha sido, de hecho, la clave para entender este fenómeno. "Seguimos siendo un puerto eminentemente importador y exportador – destaca José Alberto Carbonell, director general del organismo – y hemos logrado un récord de contenedores de importación y exportación".
Reconstrucción económica
"El Port de Barcelona es uno de los grandes motores económicos de Catalunya, y está liderando la recuperación", destaca Calvet, que apunta que la infraestructura catalana está "creciendo por encima de otros grandes puertos". La recuperación económica de la infraestructura sigue en marcha, pero todavía se encuentra lejos de llevarlo a niveles pre-pandemia: el resultado de explotación del organismo durante los primeros seis meses del año se ha quedado en los 13 millones de euros. Tal como con el pasaje, la diferencia con las cifras de 2020 es sustancial – supone un incremento del 147% - pero se queda un 31% por debajo de los datos de 2019.
Calvet: "El Port es la infraestructura económica más importante del país y tenemos que garantizar la máxima eficiencia y rapidez en defensa de nuestras empresas"
Para contribuir a la reactivación económica, el Puerto ha anunciado el Plan de Recuperación 2021-2022. Valorado en 12,3 millones de euros, el programa contempla la reducción de coeficientes de las tasas de barco, pasaje y mercancía, o la bonificación a los concesionarios de terminales diversas. Según Calvet, el Puerto tiene que posar las bases por una "recuperación rápida, pero también estable". "El puerto es la infraestructura económica más importante del país – afirma el presidente – y tenemos que garantizar la máxima eficiencia y rapidez en defensa de nuestras empresas".
En este sentido, Carbonell ha anunciado también las próximas inversiones del organismo en la mejora de la infraestructura. Según el director general, el cierre de las inversiones de 2021 se quedará en los 79 millones de euros, pero esperan incrementarlas hasta los 99 millones durante el año próximo. Esta inversión se concretará, según ha anunciado Carbonell, en proyectos como la finalización del Muelle adosado, que se llevaría a cabo durante 2022.
El Puerto quiere ser Ciudad
"Puerto y Ayuntamiento estamos de acuerdo al impulsar iniciativas culturales de gran valor añadido", defiende Calvet, afirmando que la agenda de debates con el consistorio alrededor del proyecto del Hermitage ha sido "muy intensa". "Tenemos que llegar a consensos para encontrar estos usos culturales por la ciudad", afirma el presidente.
El Consejo de Administración del Puerto ha tratado, alrededor del proyecto del museo, dos recursos presentados en diferentes sentidos: un primero, el del mismo Puerto contra el acuerdo contrario a la instalación de la Hermitage al Puerto. En palabras del presidente del organismo, el proyecto del museo «defiende el interés público y las características técnicas que permitirían su implantación». En segundo lugar, el Consejo ha aceptado parcialmente el recurso interpuesto contra la autoridad portuaria por el mismo Hermitage, que considera que la condición de firmar un acuerdo con el Liceo en un plazo de dos meses para la instalación del museo no procede – un recurso que, según ha informado Calvet, ha sido estimado por los administradores del Puerto.
Calvet: "La integración Puerto-ciudad es necesaria, dinamizará la economía y creará puestos de trabajo"
Con todo, según el presidente, el objetivo del organismo es "aportar valor cultural a la ciudad", cosa que requiere, afirma, "revertir la situación actual". Según Calvet, todo y los posicionamientos enforntats, consistorio y autoridad portuaria "continúan trabajando conjuntamente para aportar soluciones de consenso para dar usos culturales al puerto-ciudad".
Calvet ha remarcado, con todo, que el trabajo conjunto entre ambas instituciones se mantendrá durante los próximos meses, en busca del acuerdo más beneficioso por la ciudadanía. "La integración Port-ciudad, que todos deseemos y que es necesaria, que dinamizará la economía, se tiene que hacer buscando el máximo consenso entre puerto y consistorio", concluye un optimista Calvet que ve, en el futuro próximo, un Portde Barcelona perfectamente integrado en las rutinas culturales de la capital catalana.