
24
de Febrero
de
2016 - 05:30
El segundo día del Mobile World Congress ha empezado con alegría: línea 9 parada, huelga de buzo... y todo el que esto implica por el tránsito de una ciudad ya de por sí colapsada en horas punta.
En el repaso que hacíamos de la jornada de lunes, hablamos de los nuevos Galaxy S7 –y la pequeña joya que escondía Samsung, bajo el nombre de micro:bit–, de los LG modulares –y la sorpresa del Rolling Bot– y de la sobresaturación de teléfonos Android que compiten entre si un estand detrás del otro.
Durante la jornada de este martes tampoco nos hemos capficat a intentar encontrar el dispositivo Android más potente, ni el que tiene la cámara con más megapíxels. Esto nos interesa más bien poco. En cambio, hemos intentado encontrar aquellas cosas que, a pesar de que seguramente no acaparan titulares, nos han parecido curiosas o especialmente interesantes.
Los visitantes con más buena forma física, y aquellos que tengan suficiente paciencia para llegar al Hall 8 –allá donde se acaba la feria, y casi donde se acaba el mundo–, escondido entre marcas que no se sabe demasiado bien qué fabrican,encontramos ChatSim, una interesantísima compañía italiana que ha desarrollado una tarjeta SIM ideal por aquellos que viajan mucho –o simplemente para los turistas que prevén pasar una temporada en el extranjero–.
Esta tarjeta no permite hacer llamadas, ni siquiera navegar por Internet. En cambio, ChatSim ofrece la posibilidad de usar las aplicaciones de mensajería más populares del mundo –WhatsApp, Telegram, Facebook Messenger, WeChat, BBM, Line...– de manera ilimitada en cualquier de los 150 países en los cuales opera.
El más interesante es sin duda su coste: 10 euros por un año de chat ilimitado. Eso sí, por este precio, no podremos enviar ni recibir imágenes o vídeos. Si lo queremos hacer, tendremos que comprar créditos multimedia –con 10 euros más podremos enviar hasta 400 fotografías, 40 vídeos o hacer hasta 80 minutos de llamadas de Internet–.

Sin movernos del Hall 8 –bien, andando algo más hasta el 8.1–, llegamos al Graphene Pavilion, donde semuestran las últimas novedades de grafè, uno de los materiales primordiales en la fabricación de aparatos electrónicos y una de las industrias con más proyección de futuro.
Alláhemos podido ver paneles iluminados y sensores flexibles, además de tintas conductoras capaces de convertir hojas de papel en instrumentos musicales.
De vuelta al pabellón de los grandes, pasamos por el estand de Sony, donde cruzamos la zona de los nuevos móviles Xperia, la gama alta de Android. En este caso, los nuevos Xperia X son una versión un poco simplificada –y por lo tanto más económica– de los modelos Z.
Más allá de los teléfonos, nos llama la atención un widget de Sony, el Xperia Ear. En este caso, la empresa nipona parece que ha pensado que, después del fracaso de las Google Glass, quizás la clave estaba a dejar libre el campo de visión de los usuarios y poner un asistente virtual a sus orejas.
El nuevo widget tiene el aspecto del típico "pinganillo" –de acuerdo, algo más muy diseñado–, y alertará sus usuarios de nuevas llamadas, mensajes, citas del calendario y todo tipo de información útil. Habéis vit la película Her? Pues sí, mucho de este estilo pero sin las conversas subidas de tono.

Conjuntamente con Ear, Sony también ha anunciado que trabaja en un dispositivo llamado Xperia Agente, un pequeño tótem conectado y pensado para el hogar que permitirá obtener todo tipo de información útil y controlar la futura casa conectada. Además, el aparato contará con un pequeño proyector capaz de mostrar imágenes sobre cualquier superficie blanca.

En el repaso que hacíamos de la jornada de lunes, hablamos de los nuevos Galaxy S7 –y la pequeña joya que escondía Samsung, bajo el nombre de micro:bit–, de los LG modulares –y la sorpresa del Rolling Bot– y de la sobresaturación de teléfonos Android que compiten entre si un estand detrás del otro.
Durante la jornada de este martes tampoco nos hemos capficat a intentar encontrar el dispositivo Android más potente, ni el que tiene la cámara con más megapíxels. Esto nos interesa más bien poco. En cambio, hemos intentado encontrar aquellas cosas que, a pesar de que seguramente no acaparan titulares, nos han parecido curiosas o especialmente interesantes.
Los visitantes con más buena forma física, y aquellos que tengan suficiente paciencia para llegar al Hall 8 –allá donde se acaba la feria, y casi donde se acaba el mundo–, escondido entre marcas que no se sabe demasiado bien qué fabrican,encontramos ChatSim, una interesantísima compañía italiana que ha desarrollado una tarjeta SIM ideal por aquellos que viajan mucho –o simplemente para los turistas que prevén pasar una temporada en el extranjero–.
Esta tarjeta no permite hacer llamadas, ni siquiera navegar por Internet. En cambio, ChatSim ofrece la posibilidad de usar las aplicaciones de mensajería más populares del mundo –WhatsApp, Telegram, Facebook Messenger, WeChat, BBM, Line...– de manera ilimitada en cualquier de los 150 países en los cuales opera.
El más interesante es sin duda su coste: 10 euros por un año de chat ilimitado. Eso sí, por este precio, no podremos enviar ni recibir imágenes o vídeos. Si lo queremos hacer, tendremos que comprar créditos multimedia –con 10 euros más podremos enviar hasta 400 fotografías, 40 vídeos o hacer hasta 80 minutos de llamadas de Internet–.

Sin movernos del Hall 8 –bien, andando algo más hasta el 8.1–, llegamos al Graphene Pavilion, donde semuestran las últimas novedades de grafè, uno de los materiales primordiales en la fabricación de aparatos electrónicos y una de las industrias con más proyección de futuro.
Alláhemos podido ver paneles iluminados y sensores flexibles, además de tintas conductoras capaces de convertir hojas de papel en instrumentos musicales.
De vuelta al pabellón de los grandes, pasamos por el estand de Sony, donde cruzamos la zona de los nuevos móviles Xperia, la gama alta de Android. En este caso, los nuevos Xperia X son una versión un poco simplificada –y por lo tanto más económica– de los modelos Z.
Más allá de los teléfonos, nos llama la atención un widget de Sony, el Xperia Ear. En este caso, la empresa nipona parece que ha pensado que, después del fracaso de las Google Glass, quizás la clave estaba a dejar libre el campo de visión de los usuarios y poner un asistente virtual a sus orejas.
El nuevo widget tiene el aspecto del típico "pinganillo" –de acuerdo, algo más muy diseñado–, y alertará sus usuarios de nuevas llamadas, mensajes, citas del calendario y todo tipo de información útil. Habéis vit la película Her? Pues sí, mucho de este estilo pero sin las conversas subidas de tono.

Conjuntamente con Ear, Sony también ha anunciado que trabaja en un dispositivo llamado Xperia Agente, un pequeño tótem conectado y pensado para el hogar que permitirá obtener todo tipo de información útil y controlar la futura casa conectada. Además, el aparato contará con un pequeño proyector capaz de mostrar imágenes sobre cualquier superficie blanca.
