El Ayuntamiento de Barcelona anuncia la congelación de los impuestos para 2022 y prepara cambios en la bonificación de la tasa de terrazas que se concedió a los restauradores a raíz de la pandemia. De entrada, la nueva propuesta de Ordenanzas Fiscales del gobierno municipal especifica que no contempla la rebaja "excepcional y temporal del 75%" que se ha aplicado a los restauradores en los últimos meses. Ahora bien, en rueda de prensa, el ejecutivo ha atribuido esta decisión a la busca de un acuerdo amplio con el sector de la hostelería y el resto de grupos políticos para la aprobación de los presupuestos y los tributos del próximo año. Con todo, el nuevo proyecto de tributos municipales prevé unos ingresos similares a los del año pasado.
Más allá del debate sobre el futuro de la tasa de terrazas, el consistorio ha previsto un nuevo ejercicio "de contención", en palabras del teniente de alcaldía y regidor de Pressupostos i Presidència, Jordi Martí. También la regidora de Comerç, Mercats, Consum, Règim Intern i Hisenda, Montserrat Ballarín, ha remarcado que la intención es favorecer la recuperación de la economía a la vez que se reduce el peso impositivo sobre los barceloneses y los comerciantes. "En términos reales, que congelemos quiere decir que estamos disminuyendo la presión fiscal y la carga que tiene que soportar cada ciudadano o empresa", ha dicho Ballarín, reivindicando que "los ingresos se incrementarán un 0%" mientras que el coste de la vida a través del IPC ha aumentado un 3,7% en el último año.
Entre los cambios más destacados de las nuevas ordenanzas se encuentra la voluntad de extender al sector industrial la bonificación del 30% del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que actualmente disfrutan los edificios con viviendas que instalan placas solares. Como pasa con los entornos residenciales y el sector terciario, la idea es que esta reducción dure tres ejercicios impositivos. También se plantean facilidades burocráticas reclamadas por el sector turístico, el inicio del cobro de licencias para hacer volar drones en la ciudad o las bonificaciones para los vecinos que hagan reciclaje individualizado de residuos orgánicos en las zonas con nuevos sistemas de recogida.
La tasa de terrazas, clave en las negociaciones
Una de las claves de las negociaciones que se abrirán de manera inminente es el futuro de la tasa de terrazas. Actualmente está bonificada al 75% a todos los bares y restaurantes con la intención de reducir el efecto de la pandemia sobre la economía de la hostelería, pero todavía no está cerrado qué pasará el próximo año. De entrada, el gobierno municipal no prevé la renovación de esta reducción concreta en la propuesta que hará llegar a la Comisión de Economía y Hacienda de este miércoles y al plenario de finales de octubre. Ahora bien, esta postura tendría que ver con un tema formal, puesto que se querría llegar a "un acuerdo global", ha remarcado Martí.
El ejecutivo se muestra partidario de hacer una reducción, pero subraya que todavía se tiene que aclarar el porcentaje de la nueva bonificación y la duración de la medida. Ballarín, de hecho, ha puntualizado que se tiene que resolver incluso si la nueva reducción se tiene que circunscribir a 2022 o si tiene que ir más allá. Los ingresos anuales que se habrían dejado de cobrar con la bonificación actual sobre las terrazas bordean los cinco millones de euros, sobre un presupuesto municipal de 3.400 millones, ha recordado Jordi Martí, que asegura que es "asumible".
Cambios en el IBI y nueva tasa de drones
La propuesta de ordenanzas fiscales del consistorio esgrime un nuevo paso en la lucha contra la emergencia climática con una propuesta de cambio del IBI en los edificios del sector industrial. Así, se propone que aquellas naves que instalen sistemas de aprovechamiento térmico o eléctrico de la energía proveniente del sol, como las placas fotovoltaicas, podrán contar con una rebaja del 30% en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles durante tres años.
Ballarín también ha apuntado que otra novedad "curiosa" es "la incorporación de una tasa por la licencia de emisión de informes relativos a la autorización de vuelos de drones". La Guàrdia Urbana se encargaría de supervisarlo y costaría unos 200 euros cada una de estas gestiones. Según ha explicado el propio gobierno, actualmente se registran cerca de 40 peticiones de vuelo de dron al año, pero la tendencia va al alza y se ha decidido activar una regulación a través de la tasa.
En cuanto a las empresas que operan con alojamientos turísticos, el gobierno municipal ha adaptado el calendario del recargo municipal por estancias en hoteles y apartamentos para que no lo tengan que hacer dos veces, como pasaba hasta ahora. También entre las novedades, el gobierno ha reivindicado la reducción del 90% en las filmaciones con interés cultural y la creación de una ordenanza fiscal para favorecer el despliegue del 5G y ordenar los cánones de las empresas de pago de telecomunicaciones.
En la línea de los últimos anuncios del gobierno municipal, además, el Ayuntamiento formaliza la propuesta de establecer un 20% de reducción en la tasa de recogida domiciliaria a los vecinos que tengan un sistema individualizado. La idea es que hagan 40 aportaciones anuales o más en la franja orgánica. Esto ya se podría hacer en Sant Andreu, por el actual funcionamiento del Porta a Porta, y se prevé facilitarlo de manera próxima en Sarrià Vell.
La oposición
El anuncio del gobierno, sin embargo, ya ha recibido algunas críticas. El grupo de Esquerra Republicana ha lamentado que el anuncio del gobierno de Ada Colau y Jaume Collboni caiga en "el inmovilismo" y se olvide de propuestas como la llamada tasa Amazon o la reducción del IBI para familias monoparentales. En este sentido, la regidora Ballarín ha defendido que hay diferentes motivos que explican el retraso en el desarrollo de la grabación de los gigantes del comercio electrónico y que el objetivo principal es blindarse contra posibles recursos judiciales. "Sabemos que no será pacífico", ha apuntado la regidora socialista, en referencia al momento en que desplieguen la norma.
Por su lado, Junts per Catalunya ha denunciado un incumplimiento "claro" en la bonificación de la recogida de basura puerta a puerta, que se "limita" a un 20% cuando "a propuesta de Junts", la Comisión de Economía había aprobado un 50%. Además lamentan que el vecindario de Sarrià-Sant Gervasi queda "excluido". Este hecho, sumado a que han recibido la documentación a "solo 48 horas" de la aprobación inicial, hace que, "hoy", el partido esté "muy lejos" de votar a favor de "las ordenanzas fiscales de Colau y Collboni".
También ha reaccionado Ciudadanos, que en boca del regidor Paco Sierra ha lamentado que la "desconexión" del gobierno municipal con los barceloneses es "total". A su parecer, las nuevas ordenanzas "de Colau y el PSC" para 2022 "se traducen en nuevas tasas y la consolidación de la estocada fiscal a los barceloneses". Y remacha: "Son la estocada definitiva a la recuperación económica de Barcelona".