24
de Diciembre
de
2014
Hace un año queMartaMartínez yXavierRodríguez pusieron en marcha el proyecto de Fitomims , una empresa instalada en Horta de Sant Joan (Terra Alta) que ofrece a sus clientes unos kits porque se puedan hacer, ellos mismos, cosméticosnaturales con plantasmediterráneas. Todo ello con el objetivo de recuperar unos "conocimientos ancestrales" que "estamos perdiendo" y de potenciar la tendencia del 'háztelo tú mismo'. Ahora, además, han sido galardonados con el segundo premio Ecoemprendedores 2014 de BioCultura -una feria de productos ecológicos y consumo responsable- e Incubaeco -una aceleradora de empresas ecológicas-. Un reconocimiento que, entre otros, valora el carácter innovador del proyecto, y que los permitirá ampliar horizontes.
Martínez, gerente de Fitomims, es bióloga de formación, y después de hacer un curso sobre cosmética natural empezó a gestar la idea de crear una empresa que le permitiera unir sus estudios con la corriente del 'háztelo tú mismo' -DIY, don it yourself, en inglés-.
Así nació su proyecto, con la voluntad de recuperar los conocimientos de las plantasmediterráneas -como la calèndula, la hipèric, la amapola o la malva- y que la gente aprendiera a hacer uso, "a valorarlas y conocerlas", ha apuntado. Y es que la mayoría de personas no conocen sus "propiedadescosméticas y medicinales ", ha dicho. Unas plantas que de momento los facilitan productores de proximidad y ecológicos, a pesar de que trabajan con la idea de acabar produciéndolas a la misma empresa.
Entre sus clientes hay personas a las cuales los gusta hacerse las cosas ellos mismos, así como también aquellos que buscan productos naturales y ecológicos, que quieren saber exactamente qué ingredientes conforman el cosmético en cuestión. Y es que a estas alturas ya ofrecen crema de manso, leche corporal, desodorant, crema facial, de contorno de ojos, reparadora y para pieles sensibles (embarazadas y bebés). Y todo ello con el objetivo de ir generando nuevos productos, "más específicos", e ir ampliando el abanico.
En cuanto a los kits, Martínez ha explicado que los clientes reciben una caja con el manualde instrucciones para elaborar el producto -como una receta de cocina-, las herramientas necesarias y la materia primera -todo en monodosis, de forma que no se tiene que calcular-. El proceso, ha asegurado, es muy fácil, puesto que tan sólo se tienen que mezclar los ingredientes en dos recipientes al baño maria -junto con una cera vegetal- para acabar mezclándolo todo. La gerente también ha puntualizado que buscan "que la gente se forme", así que, además de los kits y de algunos recursosonline, también preparan talleres para enseñar a los interesados las propiedades de las plantas que tienen cerca de casa y como aplicarlas a un producto cosmético.
Proyecte galardonado
Ahora hace un año, en noviembre del 2013, la empresa Fitomims ganó uno de los premiosEmprende de la Diputación de Tarragona, concretamente el de la categoría Emprende en el mundo rural, en que participan proyectos realizados en municipios de menos de 2.000 habitantes. Y apenas doce meses más tarde, ha vuelto a ser reconocida con un nuevo premio, este de una convocatoria a todo el estado español. Se trata del segundo premioEcoemprendedores de BioCultura e Incubaeco. Un galardón que, según ha asegurado Martínez, los permitirá expandirse a toda la Península, además de ayudarlos a llegar más a la gente a través de nuevos puntos donde vender sus productos y distribuidores que los den un golpe de mano.
El primer premio fue por Smileat, una nueva marca de alimentación infantil 100% ecológica, mientras que el tercero se lo llevó Iwop, una bombilla que lucha contra la obsolescencia programada y la ineficiencia energética. De entre todos los proyectos presentados, el jurado valoró el carácter innovador, las fuerzas del equipo fundador de la iniciativa, su valor ambiental y social, y finalmente su viabilidad económica y financiera.
Martínez, gerente de Fitomims, es bióloga de formación, y después de hacer un curso sobre cosmética natural empezó a gestar la idea de crear una empresa que le permitiera unir sus estudios con la corriente del 'háztelo tú mismo' -DIY, don it yourself, en inglés-.
Así nació su proyecto, con la voluntad de recuperar los conocimientos de las plantasmediterráneas -como la calèndula, la hipèric, la amapola o la malva- y que la gente aprendiera a hacer uso, "a valorarlas y conocerlas", ha apuntado. Y es que la mayoría de personas no conocen sus "propiedadescosméticas y medicinales ", ha dicho. Unas plantas que de momento los facilitan productores de proximidad y ecológicos, a pesar de que trabajan con la idea de acabar produciéndolas a la misma empresa.
Entre sus clientes hay personas a las cuales los gusta hacerse las cosas ellos mismos, así como también aquellos que buscan productos naturales y ecológicos, que quieren saber exactamente qué ingredientes conforman el cosmético en cuestión. Y es que a estas alturas ya ofrecen crema de manso, leche corporal, desodorant, crema facial, de contorno de ojos, reparadora y para pieles sensibles (embarazadas y bebés). Y todo ello con el objetivo de ir generando nuevos productos, "más específicos", e ir ampliando el abanico.
En cuanto a los kits, Martínez ha explicado que los clientes reciben una caja con el manualde instrucciones para elaborar el producto -como una receta de cocina-, las herramientas necesarias y la materia primera -todo en monodosis, de forma que no se tiene que calcular-. El proceso, ha asegurado, es muy fácil, puesto que tan sólo se tienen que mezclar los ingredientes en dos recipientes al baño maria -junto con una cera vegetal- para acabar mezclándolo todo. La gerente también ha puntualizado que buscan "que la gente se forme", así que, además de los kits y de algunos recursosonline, también preparan talleres para enseñar a los interesados las propiedades de las plantas que tienen cerca de casa y como aplicarlas a un producto cosmético.
Proyecte galardonado
Ahora hace un año, en noviembre del 2013, la empresa Fitomims ganó uno de los premiosEmprende de la Diputación de Tarragona, concretamente el de la categoría Emprende en el mundo rural, en que participan proyectos realizados en municipios de menos de 2.000 habitantes. Y apenas doce meses más tarde, ha vuelto a ser reconocida con un nuevo premio, este de una convocatoria a todo el estado español. Se trata del segundo premioEcoemprendedores de BioCultura e Incubaeco. Un galardón que, según ha asegurado Martínez, los permitirá expandirse a toda la Península, además de ayudarlos a llegar más a la gente a través de nuevos puntos donde vender sus productos y distribuidores que los den un golpe de mano.
El primer premio fue por Smileat, una nueva marca de alimentación infantil 100% ecológica, mientras que el tercero se lo llevó Iwop, una bombilla que lucha contra la obsolescencia programada y la ineficiencia energética. De entre todos los proyectos presentados, el jurado valoró el carácter innovador, las fuerzas del equipo fundador de la iniciativa, su valor ambiental y social, y finalmente su viabilidad económica y financiera.