La gerundense KFT Food Technology se introduce en los EE.UU.

La fábrica de Cornellà del Terri ya exporta el 85% de su facturación en sólo cuatro años de vida

Una màqué de KFT Food Technology Una màqué de KFT Food Technology

La empresa KFT Food Technolgy, con sede en Cornellà del Terri (Pla de l'Estany), ha cerrado un contrato con una firma de referencia en el sector de la alimentación de los Estados Unidos para construir ocho máquinas procesadoras de carne. El contrato supondrá una facturación de cerca de un millón de euros para la factoría gerundense. La empresa se fundó el 2015 y este 2019 prevé cerrar el año con una facturación de 750.000 euros. Aún así, el 85% de este dinero se debe de a la exportación de sus máquinas. Actualmente la empresa tiene una importante presencia en la América Central, la América del Sur y Rusia. Sus clientes son, principalmente, empresas que procesan alimentos para supermercados.

La factoría gerundense KFT Food Technology se introducirá en los próximos meses en los Estados Unidos después de firmar un contrato para la construcción de ocho máquinas procesadoras de carne con un valor de un millón de euros, aproximadamente. KFT Food Technology ha cerrado este encargo con una empresa de referencia en el sector de la alimentación en la Norteamérica.

La empresa fabricará seis máquinas por un valor de cerca de un millón de euros

Este nuevo contrato forma parte de su plan de expansión e internacionalización. La marca prevé llegar a los dos millones de facturación en tan sólo tres años. Este 2019 cerrará el año facturando 750.000, si no cambia nada. Un 85% de este dinero provienen de las exportaciones que realiza la factoría, a pesar de tener tan sólo cuatro años de vida.

La empresa se dedica precisamente al diseño y construcción de máquinas procesadoras de carne y su público está enfocado a marcas que distribuyen los alimentos a supermercados. La mayoría de sus clientes son del centro y sur de América y de Rusia. Aún así, tienen contratos firmados en todos los continentes.

Dentro de los planes de expansión de la empresa también quiere contratar nuevos distribuidores, que a día de hoy son una docena. Su fundador, Martí Clos, ha destacado que el sector de la alimentación es "un mercado muy tradicional y las empresas suelen tener su proveedor de confianza". Clos fundó su empresa después de trabajar varios años trabajando en el mundo de la fabricación de maquinaria.

De todas maneras, él ha querido especializar su empresa en el diseño y fabricación de máquinas hechas a medida para la industria alimentaria. Por eso, el fundador y director de la empresa afirma tener un producto único a la demarcación gerundense. "La clave de nuestro crecimiento es la personalización de nuestras máquinas y la mejora de los procesos para obtener el máximo rendimiento del producto y optimizar su manipulación", ha remachado Martí Clos.

Esto representa que cada máquina se va versionant continuamente para adaptarse al mercado. A pesar de que comporte "un riesgo" el hecho de transformar cada vez la máquina, el fundador cree que "la especialización a nuestro sector es vital para sobrevivir".

El proceso integral se hace en comarcas gerundenses

A pesar de ser una empresa exportadora, la proximidad es su punto fuerte y por eso se hace todo el proceso de producción únicamente desde la planta de Cornellà del Terri " aquí hacemos toda la cadena , desde el diseño de la máquina, la soldadura y también toda la parte eléctrica y de programación", explica Clos . La compañía cuenta con 8 trabajadores . La empresa gerundense APR (Aduanas Pujol Rubió) se encarga de gestionar los trámites de exportación.

Con las máquinas de KFT el empleado sólo hay de colocar el producto e indicar y programar el tipo de procesamiento. La automatización de los procesos permite a los clientes de la firma incrementar la calidad del producto y tener un mayor control de la producción.

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