El grupo Sorigué inicia el proceso de construcción de dos edificios dedicados a alquiler municipal en los barrios del Besòs y La Verneda. Según ha anunciado la compañía, implementarán el sistema de construcción industrializada en madera contralaminada, el que otorga al proyecto "un carácter sostenible y pionero" dentro de su modelo de negocio.
Los edificios contarán con un total de 82 viviendas de titularidad municipal, 42 en el carrer Pallars, en el Besòs, y 40 en el passatge de Arriasa, en La Verneda. Esta última construcción, según la empresa, será el edificio de madera más alto construido hasta ahora en Catalunya. Ambas edificaciones se llevarán a cabo con un procedimiento industrializado que "reduce el impacto ambiental" y hace un "uso eficiente de los materiales y la producción en fábrica de los elementos estructurales".
La madera contralaminada, material con que se construirán ambos edificios, "se caracteriza por su sostenibilidad", según afirma la empresa. Tanto es así, informan, que el consumo de agua durante la ejecución de la obra será "nulo" y la generación de residuos, "prácticamente cero". El proyecto se enmarca, así, en "el compromiso del Ayuntamiento para impulsar métodos innovadores" en la construcción y otros sectores, y servirá para ampliar el parque de vivienda social de la ciudad.
Según la presidenta de Sorigué, Ana Vallés, estas nuevas tecnologías y materiales serán "clave para garantizar un crecimiento sostenible". El proyecto, así, encaja en la estrategia de negocio responsable de Sorigué, que incluye líneas como "la rehabilitación sostenible y eficiente energéticamente de edificios" o el desarrollo de "proyectos de generación de energía para autoconsum" en edificios residenciales.