"Este libro va sobre el talento de reconocer el talento", explica Quico Ballbè durante la presentación de su libro El Círculo de las Marmotas (Ediciones Camelot, 2019) acompañado por el periodista y colaborador de VIA Empresa, Marc Argemí. De padre abogado, Ballbè estudió derecho "por inercia" y después de trabajar en algunos despachos reorientó su carrera con un máster en Recursos Humanos que le abrió las puertas "de los bares y las discotecas de las empresas".
La obra empieza con un sueño a todo gas y entre curves en un BMW Serie 3 Coupé. Las primeras rayas son una declaración de intenciones recordando a Rubén Darío al grito de "Juventud, divino tesoro", el eslogan publicitario "¿Te gusta conducir?" o el clásico Carpe Diem. "De qué sirve trabajar como un animal y ganar una cantidad ingente de dinero si no es para gastártelo como te apetece?", se pregunta. Pero, para gastar se tiene que ganar y esto no resulta tan fácil como parece después de la universidad.
Tanto es así que la realidad de la vida descrita por Ballbè supera la ficción de cualquier gran coche, noche de fiesta en Luz de Gas o restaurante lujoso con Bloody Mary y ostras. Tener un máster ya no es garantía de un puesto de trabajo y mucho menos de calidad, reconoce el autor, tras haber vivido una época laboral convulsa de "despedidas, recortes, desahucios, corrupción, inestabilidad política, reivindicaciones sociales y crispación colectiva". La gran crisis económica le afectó como persona, estudiante, abogado y técnico o directivo de recursos humanos. Como todo el mundo.
"Bienvenidos al mundo real, a aquel que poco o nada se asemeja al que algunos políticos sin vergüenza o dignidad, creen firmement que somos imbéciles, se empeñan a vendernos con una insultante carga de cinismo. Bienvenido al Círculo de las Marmotas"
"Bienvenidos a mi mundo, al mundo real, a aquel que poco o nada se asemeja al que algunos políticos sin vergüenza o dignidad, creyendo firmement que somos imbéciles, se empeñan a vendernos con una insultante carga de cinismo. Bienvenido al Círculo de las Marmotas", empieza.
Una entrada que sigue con una carta datada del 26 de septiembre de 2011 y firmada por el directivo Germán Galindo: "Lamentamos comunicarle que la dirección de la empresa ha desestimado finalmente su candidatura para el cargo de Técnico de Recursos Humanos. Sin embargo, nos causó usted una grata impresión durante la entrevista que mantuvimos ahora hace unas semanas y creemos que su perfil profesional podría ajustarse a las necesidades de la empresa en un futuro no muy lejano." Traducción: una impresión poco grata del candidato como para ficharlo ahora en la empresa, pero bastante grata como para quedarse con sus datos de contacto. Por cortesía, por lo que pueda ser.
Luces, cámara y acción. El protagonista de la historia de Ballbè es Enrique Fábregas y todas sus peripecias de vida a la hora de encontrar trabajo acompañado de personajes como Jenny o Wilfredo. "Qué pasa cuando se juntan un entrevistador sin talento y un candidato en un puesto de trabajo? Nada. Pasa todos los días", espeta el autor. "Y si es un candidato dispuesto a montar un escándalo? Y si añadimos personajes variados y montamos una absurda dinámica de grupo". La magia de la escritura hace el resto en esta sátira sobre el acceso de los jóvenes con formación al mundo laboral, la gestión de "las falsas expectativas" y "el absurdo mundo" de los procesos de selección. Eso sí, siempre con humor e intriga.
"Qué pasa cuando se juntan un entrevistador sin talento y un candidato en un puesto de trabajo? Nada. Pasa todos los días"
Durante la presentación del libro, Ballbè defiende que ahora ya no se busca tanto el qué, sino el cómo y el por qué. Su receta a la hora de escoger un buen candidato es "respeto y empatía." Tanto por un lado como por el otro. De cara a los candidatos, recomienda ACTITUD POSITIVA para conseguir captar la atención y el talento de los reclutadors... Al menos, de aquellos que tienen. De cara a los reclutadors, aconseja hacer bien el proceso de selección porque "si coges a una persona que no es buena te metes el problema en casa".
"El viaje se tiene que coger con humor y filosofía y se tiene que aprovechar para madurar y aprender... Nos jubilaremos con 80 años", augura. Las marmotas marcan el camino y "al final todo sale bien y sino es que no es el final". Punto y ... Seguido.