Era una tarde de primavera lluviosa cuando un niño de nueve años le pidió a su madre que le comprara un cómic. Ella le dijo que no y le respondió textualmente que "el profesor quería que leyera más y mirara menos dibujos". Y así es como el mundo perdió otro lector. El ilustrador Toni Galmés reivindica en la sección del Lápiz la importancia del cómic y la novela gráfica hoy en día. Y no es para menos, ya que del sector editorial catalán (una "pequeña locomotora" con más de 1.441 millones y 15.000 trabajadores), la literatura infantil, juvenil y el cómic son los que lideran la facturación en catalán, en un año de récords. Una forma de atrapar nuevos lectores y aumentar los hábitos de lectura en tiempos de malos resultados en los informes PISA.
Como curiosidad, en las librerías de los Estados Unidos hay numerosas estanterías llenas de novelas gráficas, en las que los jóvenes lectores pueden empatizar con el contenido, ya que muchos de ellos viven en una cultura visual que impregna cada rincón de nuestra sociedad. En Catalunya, durante los últimos años también ha aumentado el interés por el cómic y, de hecho, durante este fin de semana se celebra la 4ª edición del salón del cómic, conocido como 42 Comic Barcelona, con la mayor oferta cultural y récord de artistas invitados que se recuerda.