Coincidiendo con la semana del código de la Unión Europea, el Ayuntamiento de Barcelona y la organización internacional Code.org han presentado el Observatorio de la Educación Computacional, con conclusiones que ponen de manifiesto la importancia de la formación en programación en las escuelas e institutos, y que servirá de marco de acción para avanzar hacia las competencias STEAM en la ciudad.
Entre los datos más relevantes del informe, extraídos a partir de encuestas a 1.600 personas de la comunidad educativa (docentes, familias y alumnado), se señala que un 84% de la comunidad educativa apuesta por la programación como asignatura obligatoria, dato que asciende al 86% entre los padres y madres de la ciudad. Además, un 72% de las personas encuestadas están de acuerdo con la incorporación de la programación a los planes de estudio a edades tempranas como factor que promueve la igualdad de oportunidades.
Del informe también se extrae que un 62% opina que el mercado laboral tiene problemas para encontrar a profesionales con formación en las disciplinas tecnológicas, y se ha evidenciado que el aprendizaje de la navegación y el uso de Internet es un 5% mayor en Barcelona que en el resto de España. Con todo, los centros que han integrado la programación con mayor éxito, pedagógicamente hablando, son aquellos que cuentan con un equipo docente con alta competencia digital.
Un 62 %opina que el mercado laboral tiene problemas para encontrar profesionales con formación en las disciplinas tecnológicas
La presencia de la programación en los centros educativos, según el Observatorio, es desigual, y se apuntan varios factores como la falta de recursos materiales, la escasez de profesorado especializado en la materia; la tipología y complejidad del centro educativo, entre otros.
En relación a los equipos docentes, el informe señala que el nivel de competencias digitales del colectivo es bastante diverso porque la formación de los profesionales habilitados por la docencia es muy heterogénea y en disciplinas muy especializadas, sobre todo en secundaria. También porque el aprendizaje digital requiere de una actualización constante de conocimientos y habilidades.
La brecha de género y los estereotipos se dejan notar en esta esfera de valoración, ya que un 65% de los jóvenes que han participado de la encuesta cree que la programación es más de chicos que de chicas.