La auditoría a Holaluz confirma las pérdidas de 26 millones de euros de la compañía. La auditora Ernst & Young pone de relieve que a finales del 2023 el fondo de maniobra era negativo por importe de 44,3 millones, y que las previsiones de tesorería para los próximos doce meses incluyen una inyección de 20 millones. Los fondos se están negociando actualmente y la compañía ya ha advertido que si no se materializan se presentará un preconcurso de acreedores. La auditora alerta de la "incertidumbre material" de una situación que "puede generar dudas significativas sobre la capacidad del grupo para continuar como empresa en funcionamiento". La auditoría se ha retrasado por la votación en contra de dos de los siete miembros del consejo de administración.
La distribuidora de electricidad multiplicó por cinco las pérdidas, después de registrar unos números rojos de 5 millones de euros el año pasado. La semana pasada, Holaluz confirmó que está negociando una operación de financiación valorada en 21 millones de euros, de los cuales 10 provendrían del Instituto Catalán de Finanzas (ICF).
La auditora alerta de la "incertidumbre material" de una situación que "puede generar dudas significativas sobre la capacidad del grupo para continuar como empresa en funcionamiento"
Con todo, en su informe de gestión, Holaluz admite que si la negociación fracasa, el consejo de administración ha aprobado la opción de un preconcurso de acreedores. La deuda consolidada de Holaluz a cierre de año era de 58,8 millones de euros. Los fondos inversores al grupo, Axon y Geroa, han rechazado las cuentas.
La negociación de la línea de financiación incluye la ICF, pero también la empresa pública Avançsa, que aportaría 3 millones, varias 'family offices' catalanes y una línea de capital de seis milons más que solo se utilizaría en caso "necesario".
Holaluz admite que si la negociación fracasa, el consejo de administración ha aprobado la opción de un preconcurs de acreedores
"En caso de no materializarse la financiación descrita, el consejo de administración de la sociedad dominante ha aprobado como vía subsidiaria, y solo en tal caso, la presentación de un preconcurso de acreedores", señala Holaluz en el informe de gestión.
La compañía afronta las pérdidas, sobre todo, por los malos números del primer trimestre del 2023, que fuentes de la empresa indican que han lastrado todo el año, pero se han conseguido revertir. De hecho, Holaluz afirma que en los últimos doce meses naturales se ha notado un "cambio de tendencia".
Víctor Ruiz Ezpeleta, profesor de EAE Business School, ha recordado que la empresa ha apostado de manera decidida desde su nacimiento por proyectos de electricidad fotovoltaica, y ha añadido que este es uno de los puntos que está lastrando ahora su actividad, porque el mercado de instalación de placas solares a domicilios particulares está sufriendo "una caída".
El hecho que parte del consejo de administración se negara a firmar las cuentas comportó que el BME Growth suspendiera la cotización de la compañía.