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Los ERTO y las nacionalidades: el monstruo oculto de la brecha salarial

Una medida progresista y de carácter social como el ERTO puede tener efectos no deseados en cuanto a género

La brecha salarial de género y los ERTO, un análisis en profundidad | iStock
La brecha salarial de género y los ERTO, un análisis en profundidad | iStock
Gemma Fontseca, jefa de redacción de VIA Empresa | VIA Empresa
Jefa de redacción
Barcelona
14 de Febrero de 2023
Act. 14 de Febrero de 2023

¿Imaginas trabajar gratis más de 50 días al año? Sería injusto, ¿no? Esto es lo que sucede a las mujeres de todo el mundo si las comparamos con los hombres. De hecho, todavía existe la brecha salarial y, por desgracia, España no es la excepción. Ellos cobran por término medio 27.322 euros brutos, mientras que ellas 22.601 euros. Por tanto, 4.721 euros menos.

 

Ésta es una de las conclusiones principales del informe La brecha salarial de género y los ERTO, un análisis en profundidad, elaborado por CCOO de Catalunya, que destaca los efectos positivos en la reducción de la brecha salarial que está teniendo la reforma laboral y las subidas sucesivas del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Sin embargo, sorprende que un año más, Catalunya sufra una brecha salarial mayor que el conjunto de España. Aunque todavía no hay datos para 2021, las cifras de 2020 muestran que las mujeres catalanas deberían cobrar un 24,5% más que los hombres de media para obtener la misma remuneración.

Las mujeres en ERTO, un 40% menos de sueldo

Los ERTO incrementaron aún más la brecha salarial de género llevándola hasta el 52%: el salario medio de los hombres en ERTO durante el año 2020 fue de 20.395 euros y de sólo 13.423 euros en las mujeres. Esta gran diferencia se vería explicada por los trabajos menos calificados, la media de edad inferior y la mayor longitud de los ERTO en el caso de las mujeres. "Un virus no puede ser machista, pero sus consecuencias sí que pueden serlo. E incluso una medida claramente progresista y de carácter social como el ERTO puede tener efectos no deseados en cuanto a género", ha comentado la autora del estudio y socióloga, Irene Galí.

 

Las mujeres catalanas deberían cobrar un 24,5% más que los hombres de media para obtener la misma remuneración

¿Cuáles son los sectores con más brecha salarial?

Los sectores con mayor brecha salarial de género entre las personas que sufrieron una situación de ERTO son los de comercio, reparaciones y transporte, el de entidades financieras y aseguradoras y el de servicios a las empresas. "Y también intuimos, pese a no tener datos concretos, que en estos casos se llamó antes a trabajar a los hombres en ERTO que a las mujeres", ha afirmado Galí. Sin tener en cuenta los ERTO, el informe de CCOO de Catalunya indica que la brecha salarial va disminuyendo paulatinamente con el paso de los años. Según el INE, en 2020 cayó 1,5 puntos, pasando del 26% al 24,5%. Según la Agencia Tributaria, la reducción fue de 2,5 puntos, del 28,6% al 26,1%.

La diferencia de la nacionalidad

En estos momentos, se mantienen enormes diferencias no sólo entre hombres y mujeres, sino entre trabajadores de nacionalidad extranjera y trabajadores de nacionalidad española. "La brecha salarial de género entre una mujer extranjera y un hombre español es del 95,9%. Es decir, claro y catalán: un hombre español cobra casi el doble que una mujer extranjera", ha querido dejar claro Galí.

Galí (socióloga): "La brecha salarial de género entre una mujer extranjera y un hombre español es del 95,9%"

Las propuestas de CCOO para reducir el sesgo de género (de casi cuatro décimas) en los convenios colectivos se basan en impulsar un salario mínimo de 1.320 euros mensuales o exigir que todas las empresas tengan un plan de igualdad. "En Catalunya existen alrededor de 6.600 empresas que deberían disponer de un plan de Igualdad y, en la actualidad, menos de 800 han cumplido con su obligación", ha comentado la secretaria de Mujeres y Políticas LGTBI, Mentxu Gutiérrez. Y también una mayor corresponsabilidad en los cuidados entre hombres y mujeres, mejores medidas de conciliación como el teletrabajo o la reducción de tiempo de trabajo, y seguir incrementando las pensiones más bajas que perciben sobre todo las mujeres.

Sin obligar tampoco a las políticas activas para la orientación profesional. Es necesario facilitar el acceso de las mujeres a sectores laborales hasta ahora poco feminizados y contribuir así a romper la segregación horizontal que también incide en la brecha.